Relaciones con Fronteras
Publicación Original en MONCADA
Desde Argentina presentaremos en Cancillería, adjunto a una carta a la  Presidente Cristina Fernández, un petitorio donde demandamos el inmediato levantamiento del Bloqueo a Cuba. 
Según anunció el canciller Bruno Rodríguez ante la onU el 28 de septiembre, en las relaciones siempre controvertidas    entre  la isla socialista  y Estados Unidos, el levantamiento de dicho  bloqueo es el punto más importante de un  proceso de diálogo que estaría  dirigido a generar un  mejor trato entre ambas naciones.  Sobre  este injusto  e inmerecido castigo, observamos que aparecen entrecruzadas variantes  desde que Obama fue promovido a Presidente, un  mandatario que a  diez días de comenzar su ejercicio,  recibió el increíble y exultante Premio Nobel de la Paz  aun sin haber efectuado nada por ella y justamente  cuando  el gobierno cubano incrementó  imputaciones sobre el golpe social y económico  que continúa imponiéndole USA, aunque se intente imaginar  aflojamientos y aproximación entre ambos países.
Conocemos que  podrían darse  nuevas relaciones entre  Cuba y su constante enemigo, un  país imperial y capitalista  que no se aviene  a las reglas de su cercano vecino    revolucionario y socialista. Por hechos explicables, Cuba  siempre resultó  agredida. Para uno, lo importante es la economía, para el otro, la igualdad y el bienestar de su pueblo. Según La Habana y aún con una temperatura menos antagonista, Washington perpetúa  el bloqueo con todo rigor y  de ningún modo manifiesta desmontar el enredado armazón de leyes y embarazos administrativos  que tiene en sus  plataformas vigentes y leyes prohibitivas contra Cuba.
Si bien  Raúl  ha opinado que son corteses y cómodos los coloquios mantenidos sobre asuntos migratorios, sólo se llegó a una eventual reposición del servicio de correo. Para sostener estos dichos    viajó a La Habana Bisa Williams, subsecretaria de Estado adjunta para Asuntos del Hemisferio Occidental que en su  periplo por  la isla  platicó con el vicecanciller Dagoberto Rodríguez y asistió al concierto de Juanes, constituyéndose en la funcionaria de mayor jerarquía que aparece en Cuba  después de varios años. Asimismo se reunió en Pinar del Río con algunos actores de la escasa disidencia interna, demostrándose a sí misma que los que piensan diferente, no están presos ni asesinados en  plazas públicas para escarmiento del pueblo, como sigue sosteniendo la gusanera asustada.
El mismo día  que la cancillería de USA  rompió el hermetismo  sobre la visita, su Oficina de Intereses (SINA)  ofreció una recepción  a la que concurrió una masiva asistencia de personalidades del mundo cultural afines al gobierno cubano y donde hubo muy pocos opositores en un sitio que con frecuencia  ha promovido la subversión prestando apoyo y financiando la disidencia interna.  Se trató, según algunos suspicaces, de un  tanteo de acercamiento del gobierno de Obama hacia la isla, porque también amplió  facilidades financieras y de viaje para la comunidad cubana residente en Estados Unidos  interesada en mantener vínculos con sus familiares.
Pero veamos los rubros en que a Obama no podría serle permitido ir un poco más allá en  relaciones bilaterales donde uno ha ajustado la soga hasta el ahorcamiento y el otro se ha defendido con decoro y bizarría. Demos una mirada sobre  la  siempre maltratada isla caribeña: Aún prosiguen las restricciones de intercambio académico por las continuas negativas de visados del sector científico. Los rechazos son justificados por las leyes de Estados Unidos, es decir el bloqueo.
La Orquesta Filarmónica de Nueva York  suspendió una visita porque el Departamento del Tesoro estadounidense negó las licencias a ciento cincuenta patrocinadores del  viaje a Cuba. Todo esto fue comunicado por el vocero de la orquesta.
En Cuba se estima que los daños de dicho aislamiento impuesto  suman  96.000 millones de dólares y  el país revolucionario presentó una vez más ante la Asamblea General de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) un proyecto de resolución que pide el cese de las sanciones para ser  analizado próximamente.  De las tremendas privaciones  no se ha salvado nadie. Según el informe presentado, el bloqueo ha impedido que empresas y subsidiarias estadounidenses armen laboratorios para vacunas, antidopaje y medicamentos oncológicos. Las pérdidas por equipamiento fuera de servicio ante la falta de repuestos ascienden a 781.000 dólares.     
La diplomacia cubana se  aplicará en la denuncia de sus menoscabos porque su extensión abarca también  a terceros países  ya que autoridades  agrícolas, del transporte, la tecnología, la ciencia,  el ambiente y la industria azucarera informaron sobre mermas sufridas por no abrirse un camino al mercado estadounidense  debido a las limitaciones financieras y negativas de todo tipo.  Las áreas más afectadas son el tabaco, la cría de cerdos, y la avicultura, una trilogía que afecta a la mayoría de las economías estatales cubanas, siempre  esmeradas en la igualdad de la alimentación, salud, educación y deportes.
Hace unos años una legislación adoptada por Washington  permitió a productores estadounidenses vender alimentos a Cuba, pero las autoridades cubanas denuncian en el informe a la onU  que las medidas y controles burocráticos a esas  compras causaron  gastos adicionales por más de ciento sesenta mil millones de dólares con los que podían haberse comprado cuantiosas toneladas de trigo, maíz y pollo,  alimentos que se incluyen en la libreta básica que  llega a toda la población.
La industria azucarera estima  que en el período analizado perdió más de ciento treinta millones de dólares por sufrir la obligación de hacer sus compras en mercados lejanos, resultándoles costosísimas  por el no  uso del dólar en bancos o firmas asociadas con ese país.
La decimoctava ocasión en que el gobierno de la isla caribeña someterá a consideración de la onU el pedido de concluir con una política  «fallida», «obsoleta» y «éticamente inaceptable» como señala el Canciller, demuestra que el gobierno conoce una vez más cómo luchar por la Revolución en las condiciones actuales, tal como  hizo ante la caída de la Unión Soviética y durante el espantoso período especial de los años noventa,  cuando sobrevivieron  rodeados de fronteras enemigas en lo cultural, económico, y  sanitario  sin  jamás claudicar ante el imperio capitalista.
Es conocido que desde hace más de cincuenta años Cuba recibe la peor parte y ha  resistido a los intentos de USA con heroísmo patriótico.  Las prohibiciones de Washington durante  este medio siglo  impidieron  relaciones económicas y comerciales  hoy  mostradas con intención de cambios de baja intensidad,  desde  la administración del “demócrata” Barack Obama.
Aún con  el  alejamiento transitorio  del genial  líder Fidel Castro, el Gobierno de su hermano Raúl  continúa firme  mostrándo seguridad y serenidad.  Conociendo sus pensamientos,  estamos al tanto  de que de haber reformas,  serán con intencionalidad y dirección estratégica anticapitalista, basadas en  innovaciones acordes con la hegemonía regional y dentro de  un socialismo igualitario, martiano y nuestro americanista.
Como diría Martí, cumplida la hora de los hornos no habrá en el mundo quien    apague  la rutilante luz. y nuestro vino es ácido, pero es nuestro vino.
Adriana Vega
16 de octubre del 2009