Principales reivindicaciones de la marea de pensionistas y su razonamiento
La financiación del sistema de pensiones estará garantizado por el estado destinando las partidas necesarias al efecto en los PGE y aportando las partidas complementarias que coyunturalmente se precisen.
Las pensiones del sistema de SS responden al derecho adquirido por los trabajadores como cotizantes hasta que llega su hora de jubilación, invalidez u otra contingencia, constituyen un derecho adquirido y consolidado, por tanto no deben estar sujetas a fluctuaciones coyunturales en los ingresos de la SS.
Es insultante e incoherente que las pensiones del sistema de la SS tengan menos protección y garantía que las de los políticos, los cargos públicos, los altos funcionarios de la administración o las de las fuerzas armadas.
La separación de las fuentes de financiación sólo deben entenderse como una herramienta para la mejor previsión y gestión de los recursos, nunca como un elemento de exoneración de la responsabilidad del estado y menos aún como un elemento para justificar por la propaganda del pensamiento único de fondo liberal, según el cual el sistema público de pensiones quebraría porque hay menos trabajadores y más pensionistas, en este escenario el poder financiero presenta su gran negocio como solución, tal es, el fraude de los planes de pensiones privados.
Las cotizaciones sociales constituyen fuente primordial, que no exclusiva, de ingresos para el sistema. Se deben incorporar sin demora nuevos conceptos a fin de mejorar las cotizaciones introduciendo la variable de la productividad. Es necesario fortalecer la recaudación contributiva eliminando los topes de cotización, haciendo que estén sujetas todas las partidas salariales incluidas las dietas sobredimensionadas, los pagos en especie como los seguros médicos privados y suprimiendo subvenciones y exenciones de cotización que tanto están socavando los ingresos de la SS en beneficio de las empresas como el actual contrato de tarifa plana. Las aportaciones económicas de las empresas a Planes de Pensiones de Empleo o Individuales son salario y como tal deben estar sujetas a cotización para todas las contingencias.
2-Las pensiones se incrementaran anualmente con el incremento del IPC previsto, incorporando las diferencias que pudieran existir a final de año con el IPC real y con efectos retroactivos desde el uno de enero.
Es la condición mínima para evitar que a lo largo de la tercera edad las pensiones no se reduzcan drásticamente en su capacidad de compra, muy especialmente las de invalidez que tienen más años de duración.
3-Las pensiones mínimas deben ser dignas alcanzando el objetivo de 1000 euros mensuales.
Hay dinero para ello. España dedica al capítulo de pensiones de jubilación un porcentaje del PIB muy inferior a los países de nuestro entorno, por tanto es un problema de distribución de la riqueza.
Esta medida es importante y urgente, tanto por necesidad vital de las/os pensionistas que superviven en la pobreza como por lo que significaría como paliativo de la actual brecha de género (400 euros) en la cuantía de las pensiones actuales.
Los acuerdos de 2011 introdujeron la exigencia de 2 años más de cotización mínima para tener derecho a la pensión, la no cobertura de todas las lagunas de cotización y el tope a los complementos a mínimos que generan pensiones por debajo de las mínimas conocidas hasta ahora, ahondando así en la brecha de género, ya que son precisamente las mujeres las de mayor intermitencia en su carrera laboral, menos años cotizados, menores salarios, cuantías de cotización a tiempo parcial etc. Ya tenemos ejemplos de personas en esta nueva situación, con pensiones del sistema contributivo por debajo de la pensión mínima, de no corregirse se irán multiplicando exponencialmente.
4- Jubilación con carácter general a los 65 años.
Fue infame la nueva fórmula de cálculo de Rajoy con imposición del factor de sostenibilidad hundiendo a los futuros pensionistas, infame la fórmula de revalorización congelante, como es infame la propuesta del gobierno de compatibilizar trabajo y pensión de jubilación. Pretende abrir una brecha para justificar las pensiones de miseria y precarizar todavía más el mundo del trabajo enfrentando generaciones a la busca de empleos basura, de paso quiere beneficiar a las empresas que dejarían de cotizar por la mayoría de contingencias trasladando así más dinero de la SS a los empresarios, pero también fue un error la anterior reforma que sitúa la jubilación a los 67 porque les quita dos años de vida y pensión a los trabajadores y sobre todo porque es inconcebible en un contexto de paro estructural vergonzoso sobre todo entre los jóvenes.
5- Derogación de la reforma laboral, las últimas reformas de la SS y de la ley mordaza.
Conscientes de que forman un todo para hundir los salarios, las pensiones e impedir la movilización. Es imprescindible la lucha de todos hasta conseguirlo, la marea no faltará a la cita con los trabajadores de hoy, pensionistas de mañana y con los pensionistas de hoy trabajadores de ayer. Es un hecho que con el actual marco normativo en derecho de trabajo y SS destrozaran definitivamente el sistema público de pensiones con un futuro a medio plazo de pensiones mínimas generalizadas a la inmensa mayoría de trabajadores, por tanto no sirven retoques, es de imperiosa necesidad revocar dichas reformas.
7- Sistema exclusivamente público de SS, por tanto de financiación, gestión y control público.
Los planes de pensiones privados, como su propio nombre indica, deben quedar fuera de lo público y por tanto ajenos a incentivos y beneficios fiscales o exenciones de cotización a la SS.
Es el poder financiero el primer interesado en desprestigiar y hundir el Sistema público de pensiones. Su despliegue de propaganda para hacernos creer que el sistema de la SS no es sostenible y sus presiones para que el poder político legisle en contra del sistema público están siendo claves para debilitar las pensiones. No podemos ser cómplices de la especulación financiera con los planes de pensiones privados cuyo oscurantismo puede superar con mucho el fraude de las preferentes por la propaganda engañosa por la información que se oculta y por los altos costes de gestión, Procede ser beligerantes.
Noviembre de 2016
Marea de pensionistas.