Miquel Buch entrevistado sobre el accidente de Iqoxe: «Fue un hecho insólito que no estaba previsto en ningún plan»
MIQUEL BUSH ENTREVISTADO SOBRE EL ACCIDENTE DE IQOXE
“Nadie previó un accidente de la magnitud de Iqoxe, fue un hecho insólito que no estaba previsto en ningún plan”.
Supongo que en algún lugar estarán registrados los accidentes graves habidos en Tarragona (consecuencia de la industria química) con muertos y sin ellos. En Tarragona, algunos de los accidentes en que no hubieron fallecidos, fueron incluso más preocupantes, que el de IQOXE. Yo recuerdo el producido en AISCONDEL, hoy ERCROS, cuando trabajando en unas soldaduras se prendió fuego en una de esas esferas que al parecer, hoy, deberían estar soterradas. Estuvieron a punto de evacuar Vilaseca. No lo hicieron por no crear pánico y por sus consecuencias posteriores. Por este motivo se arriesgaron a no haberla podido apagar y a que hubiera ocurrido un desastre inimaginable con estas esferas que contenían cloruro de vinilo. Un producto inflamable, tóxico y cancerígeno.
Siendo yo S. G. de CCOO en Tarragona, tenía información de algún que otro accidente de los que entonces se producían a menudo. De alguno de estos, basado en escape voluminoso, me comentaban de la suerte que habían tenido que, ese día, el viento soplara en dirección opuesta a donde se estaba soldando o existían otros elementos que hubieran provocado la deflagración.
La cisterna de los Alfaques que se cobró más de doscientas víctimas, podría haber sido infinitamente peor, pues pasó por la Plaza Imperial Tarraco y por la carretera donde se encuentran industrias químicas que van desde Bonavista hasta Villaseca.
Que el Conseller de Interior M. Bush diga que, a raíz de este accidente en IQOXE, las cosas cambiarán, que habrá un antes y un después; es tomar a las poblaciones afectadas y a los trabajadores por menores de edad.
El periodista le recuerda (como algo a tener presente) que hubo una manifestación de 3000 personas, cuando perfectamente podrían haberse manifestado muchísimas más, si la convocatoria se hubiera organizado adecuadamente como correspondía. “Se le olvida”, en cambio, recordarle la huelga que se hizo en este sector de manera general, por primera vez, que fue mucho más importante (todo y que hubo también lagunas). No obstante ya sabemos que quien paga manda. Este diario entrevistador (no el periodista), percibe de vez en cuando cantidades económicas suculentas de esta industria por motivos de propaganda. De modo que, ahora toca colaborar para borrar de la conciencia obrera que en la química pueden hacerse huelgas como en cualquier otro sector laboral, incluso con más razón.
En la respuesta a, “si Tarragona estaba preparada para graves emergencias”, “nuestro Ministro” al principio responde que se dispone de todas las herramientas para estar preparados y, al final explica que hace falta comprar y renovar material. Habla de los bomberos sin aclarar cuál es la verdadera situación que tenemos en Tarragona de este cuerpo y la relación y actuación que tienen o han de tener en la industria química. Sabemos que eliminaron, la plantilla fija que había en algunas empresas. Que las de los bomberos públicos son escasas y, que no existe un cuerpo especial para la industria y especialmente para esta, como ocurre en el caso forestal, marítimo y montaña.
Se “agradece su reconocimiento” a que las condiciones laborales es uno de los problemas para la seguridad. Los sindicatos alternativos y los trabajadores en sus asambleas así lo han manifestado en muchas ocasiones; situándolo no como uno más, sino como el problema determinante. Los trabajadores se han de poder defender ante las amenazas de despido y de no ser contratados en las próximas faenas, cuando se les exige que trabajen en condiciones inadecuadas y peligrosas.
Los problemas de seguridad no se pueden resolver si las plantillas de personal se continúan reduciendo en vez de ampliándose; si las jornadas laborales se amplían en vez de reducirse; si la contratación y el despido siguen siendo al gusto de las empresas contratistas encargadas de la faena en las químicas, si los raquíticos salarios obligan hacer horas extras y turnos de 12 horas y, junto a todo esto, que a la inspección de trabajo se le otorguen más atribuciones en todos los aspecto.
“Nadie previó un accidente de la magnitud de IQOXE”. “Fue un hecho insólito que no estaba previsto en ningún plan”. Remarca el Conseller. Este señor sabe que, si no se prevé en este aspecto, es porque, no sólo no aporta beneficios, sino que se pierden. El “ministro” catalán es consciente de que al sistema depredador lo que le sirve es prever como ganar dinero, y siempre a costa de los trabajadores y del pueblo que son sus víctimas preferidas.
Sin embargo, sí que había previsiones de que ese tipo de accidentes y mucho peores podían suceder y seguirán sucediendo desgraciadamente. Pero “nuestro” Conseller también sabe que a determinadas previsiones y opiniones no se las ha de dar credibilidad, todo y que, desde que existen las químicas y las nucleares en Tarragona hayan sido señaladas, denunciadas y acertadas. Siempre lo han denunciado los trabajadores del montaje, que son los que más saben y sufren las consecuencias, así como determinados grupos ecologistas y los sindicatos de clase alternativos, que no están enredados en burocracias y en corrupciones.
Lamentablemente no esperemos importantes soluciones. Ahora lo que harán empresas y administraciones, será lo mismo que han hecho cada vez que habido un accidente; irán aminorando las promesas y mantendrán y aumentarán los métodos de propaganda a favor de las químicas, hasta que la ciudadanía de a pie y los trabajadores, se vayan anestesiando y olvidando de lo ocurrido una vez más.