EL FRENTE NACIONAL de Lucha por el Socialismo (FNLS) es una organización independiente que reivindica la lucha obrera, campesina, indígena y popular. Como su nombre lo dice, luchan por el socialismo, pues saben que ésta es la única salida real que tiene el pueblo trabajador y explotado para cambiar sus condiciones de vida. Tienen presencia y arraigo en diferentes estados del país, entre ellos Chiapas, Hidalgo, Veracruz, Jalisco, Puebla, Ciudad de México, Michoacán y Oaxaca.
Aunque como miembros del movimiento independiente llevan una larga trayectoria, fue en 2006 cuando se constituyeron como FNLS. Desde esa fecha hasta ahora han sido víctimas de diversos actos de represión, al ser una organización independiente del Estado mexicano, de sus instituciones y de la burguesía, quienes no han parado en demostrar el odio que le tienen al pueblo organizado y se han ensañado con los compañeros de esta organización. Las graves violaciones a los derechos humanos a las que se ha recurrido van desde la desaparición forzada y el desplazamiento forzado hasta la ejecución extrajudicial y los arrestos ilegales; pues el FNLS ha demostrado una y otra vez que es una organización consecuente y combativa que lucha por la transformación del país.
Esta represión sistemática contra los compañeros es más aguda en algunos estados: el gobierno del experredista Rutilio Escandón Cadenas, actual gobernador del Estado más pobre del país: Chiapas, es un claro ejemplo de que el terrorismo de Estado no ha desaparecido en la 4T, este personaje que ahora es parte del Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), pero que apoyó incondicionalmente al exgobernador Manuel Velasco Coello, no ha cambiado de estrategia y sigue implementando la política neoliberal que tanto daño le ha hecho al país.
Los compañeros del FNLS han sido objeto de diferentes ataques, que hemos denunciado en diversos espacios, desde la ejecución extrajudicial de Humberto Morales Santiz (niño de 13 años) el 28 de febrero de 2017 y la detención-desaparición de Fidencio Gómez Santiz el 5 de marzo de 2016, hasta los constantes hostigamientos a las que son sometidas las comunidades que pertenecen a la organización.
Sin embargo, en los últimos años los actos de represión se han agudizado, el 19 de junio de 2019 se efectuaba la ejecución extrajudicial de Mario Moreno López, de la Comunidad 20 de junio (fundada en 2018); el 17 de julio de 2019 Javier González Díaz fue detenido en Chiapas y desaparecido por más de 24 horas; un día después, el 18 de julio, eran ejecutados extrajudicialmente Domingo Gómez Sántiz y Juan Calixto Gómez Sánchez; meses más tarde Armando Hernández Sánchez fue detenido el 30 de septiembre (cabe recalcar que ambos luchadores sociales fueron torturados); un mes después, el 21 de octubre, fueron detenidos Venturino Torres Escobar y su esposa Asunción Gómez Sánchez el día 21 de octubre por elementos de la policía estatal en la ciudad de Tuxtla Gutiérrez; lamentablemente, siguen siendo presos políticos del estado chiapaneco.
La pandemia provocada por el Covid-19 no ha detenido la represión, pues el 8 de junio del 2020, Carlos López Gómez fue detenido junto con su esposa Angelina Santiz López a la altura del campamento paramilitar “Nacimiento”, en el municipio de Oacosingo; un día después, el 9 de junio, Enrique Herrera Jiménez fue detenido por el grupo paramilitar “los petules”, que habitan el campamento del “Nacimiento”. Este grupo paramilitar se ha dedicado a hostigar a los compañeros del FNLS desde hace un tiempo: cada vez que pueden lanzan disparos a la comunidad del Carrizal, amenazan y roban, todo esto lo hacen al amparo de las autoridades, pues en múltiples ocasiones se ha denunciado su actuar y el peligro en el que se encuentran las familias, pero el Estado mexicano simplemente permite que sigan actuando en contra del pueblo organizado. El 14 de junio de 2020 fueron presentados y liberados Carlos López, Angelina Sántiz y Enrique Herrera. Esto fue posible mediante la movilización, las acciones políticas y la solidaridad del pueblo que exigió su presentación con vida y su libertad.
Aunque Chiapas mantiene esta actitud represora, no es la única que se ensaña con el pueblo: en Michoacán el gobierno de Silvano Aureoles Conejo detuvo de manera arbitraria al profesor Leobardo Reyes Meza, el 29 de junio del 2020, en un operativo de la policía municipal de Pátzcuaro, que invadió terrenos comunales de la comunidad de Ihuatzio, municipio de Tzintzuntzan. El profesor fue presentado en Aprehensiones de la FGE en Morelia, donde lo consignaron al Cereso Lic. David Franco Rodríguez, esto después de que mantuvieran escondido su paradero durante varias horas.
Todos estos hechos son muestra de la represión que sufre el pueblo trabajador y explotado, que busca organizarse de manera independiente para mejorar sus condiciones de vida. El FNLS es una organización que ha demostrado en los hechos que es del pueblo; quienes los conocemos sabemos que los que conforman dicha organización son compañeros solidarios, pues han enarbolado la lucha en exigencia al Estado de la presentación con vida de los detenidos-desaparecidos, la libertad de los presos políticos y alto a la represión contra los luchadores sociales, pues desde hace 10 años forman parte de la Campaña Nacional Contra la Desaparición Forzada. Todos los ataques que han recibido, (no sólo nos referimos a las detenciones con cargos irrisorios y ejecuciones extrajudiciales, sino también a los ataques en diversos medios de comunicación que tienen por único objetivo la criminalización para aislar y dividir al pueblo) los conocemos muy bien, pues se trata de herramientas que han sido utilizadas por el Estado desde hace mucho tiempo. Por ello como Organización de Lucha por la Emancipación Popular (OLEP) exigimos la libertad inmediata de Javier González, Armando Hernández, Venturino Torres, Asunción Gómez y Leobardo Reyes; juicio y castigo a los responsables materiales e intelectuales de las ejecuciones extrajudiciales de Humberto Morales, Mario Moreno, Domingo Gómez y Juan Calixto, y presentación con vida de Fidencio Gómez, pues si este gobierno es del pueblo, su actuar debe ser diferente y debe castigar a los funcionarios locales que intentan destruir la organización popular. Por ello, seguiremos repitiendo una y otra vez: ¡Con represión no hay transformación!
NOTA: Este artículo fue publicado como parte de la Contraportada del No. 55 de FRAGUA, órgano de prensa de la Organización de Lucha por la Emancipación Popular (OLEP), julio, 2020.
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