México: Sofía cumple 8 años
Sofía; ahora que sabes leer, te quiero contar un cuento, – hace años, cinco, para ser exacto, los duendes que viven en mi cabeza y las hadas que con hilos mágicos manejan mis dedos decidieron unir su alegría justo cada día de tu cumpleaños, por ello hacen una fiesta con todo lo que se necesita para que una niña, como tú, sea feliz, entonces, en cada fiesta te dedican un escrito.
¿Un escrito? ¿Qué tanta felicidad puede una niña de 8 años obtener con un escrito? … una niña como hay millones; tal vez muy poca, pero tú, una criatura llena de amor e inteligencia seguro estoy que con una cadena de cuentos e historias podrás construir un mundo perfecto, ya que tú, antes de nacer, fuiste un hada que, bailando, hacías luz y, mientras más rítmico y alegre fuera tu baile más luz creabas.
Recuerdo bien que, el primer escrito lo envié directo a tu alma, cumplías 3 años, tu cabello rojo se regodeaba en la playa y tus grandes ojos eran habitaciones de tu alma vieja. Cuando cumpliste 4 años ya sabías de tu vida anterior, jugabas a todo, y en cada juego arrojabas magia e imaginación, a los 5 conocías ya el gran valor de una buena fotografía, entonces, cada que veías que el lente de una cámara buscaba tu presencia tú, asías todo fácil para que mami se llenara de “buenas fotografías” …
Hoy cumples 8 años, ya sabes leer, por ello es que el sentido de mi escrito busca ser más claro, porque sé que tú lo estás leyendo, y es tan intensa mi propósito, mi niña hermosa, que veo tus grandes ojos sobre mis letras y hasta escucho tu vocecita leyendo y preguntando qué quiere decir cada palabra que no entiendes.
No puedo dejar de comentarte, Sofía bonita, que tú, como mexicana, tienes que pensar en tú país con mucho amor, hoy deja que tus padres (y hermosas abuelas) se preocupen por ese asunto, tú, cada lunes promete lealtad y fidelidad a tu bandera, esa de tres colores, y, date tiempo para tratar de entender que es lo que quiere decir todo eso de banderas e himnos…
Es difícil escribirte más, primero porque este es el primer escrito que se que TU lees, antes, como te comento arriba, le escribía a tu corazón y me conformaba con imaginar que él me entendía, ahora me intimida saber que tu cerebro está procesando estas palabras y puede ser que hasta te preguntes “y este señor ¿Quién es?”
Sea pues, que la bendición de tu abuelo cubra tu aura, que el ritmo que traes en tu sangre mitad libanesa mitad San Marqueña y que tu voz perfecta hagan las veces de puente hacia una vida llena de amigos y afectos,
Ha, y por supuesto, ahora que lees, espero tu respuesta, pues estoy cierto que también escribes.
Por último, en el primer párrafo de mi escrito, te hablé de “contarte un cuento” Sofía… te quiero pedir la oportunidad de contártelo yo, personalmente, sentarme frente a ti y regodearme con tu imaginación..Mira, tengo varios. El de “el hada que cantaba tan bonito que las estrellas aplaudían al terminar ella de cantar”, el de “la Sirena que, en las noches de luna llena se ponía sus piernas y se iba a bailar música cubana”…tenía que ser cubana porque ella era una sirena que nadaba en los mares del Caribe, o, el más bonito de todos “el del Delfín que, fue castigado por el rey Neptuno y lo convirtió en hombre” este último va más o menos así- hubo una vez un delfín, un gran delfín que por su perfección para nadar tuvo la mala suerte de incomodar a el Dios del mar, por ello, este ser convirtió a ese gran delfín en hombre, la vida pasó, pero una buen día, el Delfín fue a la playa y reconoció su casa, trató de regresar y por más que nadó y nadó, Neptuno no se lo permitió… lo más que pudo hacer el moreno ex delfín, fue convertirse en “surfer” y vivir junto al mar…
Que Dios te bendiga nieta hermosa…ustedes, las nietas del mundo son el amor perfecto, llenan de ternura la vida, son puro cariño y son más nuestras que ninguna otra mujer.