Los trabajadores de Nissan se movilizan: pueden perderse 25000 empleos
Cientos de trabajadores de Nissan y sus subcontratas se han concentrado este martes frente al consulado de Japón en Barcelona para exigir un futuro industrial para las plantas de la firma automovilística de origen nipón en toda España.
Unos 500 trabajadores de Nissan y sus subcontratas se han concentrado este martes frente al consulado de Japón en Barcelona para exigir un futuro industrial para las plantas de la firma automovilística de origen nipón en toda España. «No pagaremos vuestros errores» es el mensaje de la pancarta que ha encabezado la concentración en la Diagonal. Los sindicatos han hecho frente común ante una situación que definen como «crítica» y de la que responsabilizan a la dirección. En Catalunya están en vilo casi 2.500 empleos directos y, sumando a las plantas de Ávila, Cantabria y a las empresas auxiliares, los cálculos sindicales elevan la cifra hasta los 25.000 empleos en toda España.
«Inquietud», «indignación» y «hartazgo» han sido los vocablos con los que los trabajadores resumían el sentir de la plantilla mientras cortaban el tráfico en la Diagonal en señal de protesta. A la concentración han asistido 500 personas, según cifras de la Guardia Urbana. En menos de un mes la empresa les ha comunicado que han perdido la producción de dos modelos (X Class de Mercedes y la e-NV200 eléctrica) en Zona Franca, dejando las plantas catalanas a una capacidad que actualmente ronda el 20%. Nissan ha ido perdiendo año a año volumen de ensamblaje en sus plantas, pues si en el 2010 fabricaba 141.218 unidades, el 2019 lo cerraba en las 53.119. Y para este 2020 la previsión es de 42.000 unidades; según datos facilitados por UGT-FICA.
«No dejaremos que maten poco a poco [la planta de] Zona Franca», ha declarado el presidente del comité, Juan Carlos Vicente. «Para Catalunya, Nissan es su segundo motor», ha reivindicado. Las centrales se sienten engañadas, pues consideran que durante los últimos años han ido asumiendo recortes de plantilla y congelaciones salariales en post de asegurar el futuro de las plantas. Los trabajadores afectados por el último ERE, de 600 despidos, todavía están abandonando durante este año la compañía. Este miércoles los sindicatos con representación entre los trabajadores (CCOO, UGT, USO y CGT) tienen prevista una reunión para marcar un calendario de movilizaciones con el que dar continuidad a la protesta de este martes frente al consulado japonés.
La Generalitat aprieta a Nissan
La Generalitat, por su parte, también ha salido este martes a poner presión sobre Nissan para que aclare cuanto antes el futuro de sus plantas, consciente del terremoto social y económico que supondría un cierre. «Catalunya ha hecho los esfuerzos necesarios para que llegue un nuevo modelo«, ha aseverado el secretario general de Treball, Josep Ginesta.
Y es que el pasado 1 de octubre el Govern de la Generalitat aprobó una subvención de tres millones de euros para Nissan, bajo la condición de que renovara su planta de pintura en Zona Franca para adaptarse a las nuevas normativas europeas en materia de contaminación. La firma japonesa presupuestó abordar una inversión de 70 millones de euros para dicha reforma. Dicha planta todavía no ha comenzado a construirse y está previsto que las obras comiencen este año; aunque desde los sindicatos recelan y señalan que el grueso de la inversión no lo esperan, como mínimo, hasta el 2022.