Los decretos del Gobierno Evo, hojarasca demagógica
Evo Morales promulgó en una concentración en la Plaza Murillo, el Primero de Mayo, cinco decretos que favorecen -dice- a los trabajadores del país. Como tantas otras disposiciones legales dictadas en el pasado, los patrones y el Estado se darán modos para burlarlas, como ha ocurrido con el DS 28699 que prohíbe la libre contratación y que sólo ha servido como papel higiénico para los empleadores porque nunca han dado cumplimiento a esa disposición legal.
Gran parte del anuncio presidencial es hojarasca demagógica que sólo tiene un objetivo electoralista. Veamos cuáles son los referidos decretos:
1.- Los trabajadores con contrato temporal gozarán de los mismos beneficios que los trabajadores regulares de la empresa, sea ésta privada o pública.
¿De qué beneficios habla el demagogo de turno, cuando la empresa privada -principalmente- desconoce los derechos sociales aún de los trabajadores regulares? A este hecho se debe la existencia de pleitos interminables que duermen en el Ministerio del Trabajo.
2.- Otro decreto dice que las empresas tienen la obligación de garantizar todas las normas de higiene y de seguridad industrial para evitar enfermedades y accidentes de los trabajadores.
¿Acaso había necesidad de un decreto para que el Estado obligue a los empleadores a cumplir algo que ya esta establecido en la Ley General del Trabajo?
3.- También dispone que los trabajadores que hubieran cumplido 91 días de trabajo continuo pueden retirarse -no importa voluntariamente- con el derecho al cómputo con duodécimas para el pago de la indemnización
Los empresarios se darán modos de burlar esta disposición, por ejemplo, despidiendo a los trabajadores al cumplirse los 80 días.
4.- Otro decreto dispone que los empleados públicos de la administración central y descentralizada gozan de un bono de 1.000 Bs.
Bien por la medida que sólo favorecerá a una gran mayoría de mamones masistas que han asaltado los cargos públicos.
5.- Finalmente, dispone en otro decreto que los maestros deben aportar el 1% de su sueldo básico a favor de sus organizaciones sindicales por los 12 meses del año.
Si se hace una consulta nacional preguntando a los maestros de base qué opinan sobre este decreto, el 99% va ha rechazar la medida no porque sean antisindicalistas sino por rechazo a sus direcciones oficialista e inútiles.
Al presidente demagogo hay que exigirle medidas reales y efectivas para aplacar el hambre en los hogares bolivianos: salarios que cubran las necesidades vitales de los trabajadores y sus familias; aumento de salarios en la misma proporción que suben los precios de los artículos de consumo; que garantice fuentes de trabajo para evitar que los bolivianos sigan migrando; tierra para los campesinos y liquidación efectiva del latifundio.