La solución de la policía contra las amenazas ultras: dejar de grabar para “evitar problemas”
Periodistas y Fotoperiodistas de Aragón, dos colectivos que reúnen a la mayoría de los profesionales de la información y la comunicación en el territorio, han denunciado las amenazas y agresiones verbales contra un periodista que tuvieron lugar el sábado por la tarde en el centro de Zaragoza, durante la manifestación irresponsable ultraderechista. Ambas entidades profesionales han trasladado que respaldan la libertad de expresión y recuerdan que el trabajo de los medios de comunicación representa un servicio público esencial en cualquier democracia y que “merece el máximo respeto por parte de la ciudadanía y los poderes públicos”.
Los hechos ocurrieron en el transcurso de la movilización convocada en redes sociales, entre ellas las del periódico Heraldo de Aragón, por el Paseo de la Independencia de Zaragoza, donde el sábado por la tarde se congregaron ultraderechistas con cacerolas y banderas españolas, muchas de ellas con aguilucho incluido, en contra de la gestión de la crisis del coronavirus por parte del Gobierno de Sánchez.
Un operador de cámara de TVE fue increpado fuertemente, mientras realizaba su trabajo, por alrededor de 30 manifestantes, algunos de los cuales incumplieron la distancia mínima de seguridad de dos metros, al situarse delante del objetivo de la cámara para obstaculizar la grabación. “Además, a los insultos referidos a la labor de Televisión Española, cadena a la que acusaron de manipulación informativa, se unieron otros personales”, señalan los colectivos.
La Policía española intervino rápidamente y condujo al cámara de TVE del centro a uno de los paseos laterales de Independencia. Desde allí, y arropado por dos compañeros fotógrafos, intentó seguir grabando para cumplir con su deber profesional. Tal y como relatan estos colectivos, “los agentes policiales le instaron a apagar su cámara para evitar mayores problemas, pues las amenazas de tres manifestantes (uno de ellos ataviado con la bandera española junto con el yugo y el haz de flechas) no cesaban”.
Ante estos graves hechos, que suponen un claro atentado a la libertad de expresión y el derecho a la información, los colectivos Periodistas y Fotoperiodistas de Aragón reivindican el trabajo de los profesionales de la información y rechazan todo intento de entorpecer, coaccionar e influir en los trabajadores de los medios de comunicación con amenazas y agresiones.