La manada eclesiástica
Lluis Tó Gonzáles, José Luis Untoria Mahave, el párroco de El Garrobillo (Murcia), Amador Romero, Ignacio Lajas Obregón, Gregorio S., Rafael Sanz Nieto, Juan José Ayensa, Fernando Vecino, Ángel Luis Saldaña, Elias, un sacerdote de Cáceres y Juan Carlos M.T.
13 sacerdotes españoles condenados judicialmente desde 1992 a una pena máxima de 2 años por abusos sexuales y violaciones a discapacitados o menores de edad de entre 8 y 14 años, muchos de ellos de forma reiterada durante años. Al carecer de antecedentes penales no ingresó ninguno de ellos en prisión, lo que posibilitó que algunos sigan en activo.
A comparar con las condenas de cárcel a decenas de años por el mismo delito cometido por personas no religiosas, una única vez y con víctimas de mayor edad.
El Ministerio de Asuntos Sociales encargó en 1994 a un catedrático en psicología infantil un estudio sobre pederastia, en él que se culpa a la Iglesia católica del 4 % de los casos de pederastia en nuestro país. En España hay 18.813 curas y si un 4 % de los casos de pederastia son cometidos por ellos, cuando los curas son solo el 0,157 % de los varones de +24 años en España, resulta una proporción 25 veces mayor que la media entre la población. Y la Conferencia Episcopal y los Defensores del Menor siguen sin realizar el registro de los casos de abusos sexuales y violaciones a menores.