Jorge Vestrynge: «El pueblo saharaui no existe… es sólo una creación de Argelia y de la izquierda española»
Uno de los mentores ideológicos de Podemos insta a Argelia » a ocuparse de sus propios problemas», y no inmiscuirse en los asuntos de Marruecos
Jorge Verstrynge declaró desde el territorio saharaui ocupado militarmente que “Marruecos es el país que ha logrado el mayor progreso y crecimiento económico en África y está realizando esfuerzos considerables en solidaridad con los países africanos”
Con auténtico alborozo recogió este lunes la web «infoMarruecos», un digital gubernamental marroquí dedicado a halagar al régimen monárquico alauita, las declaraciones formuladas por Jorge Verstryngeen las que expresaba su opinión de que «el territorio del Sáhara es marroquí y lo ha sido siempre».
Al rotativo monárquico español ABC le faltó tiempo para ofrecer una amplia cobertura a las declaraciones antisaharauis del que todavía continúa siendo asesor personal de Pablo Iglesias, el secretario general de la organización socialdemócrata Podemos.
La verdad es que el impacto de las declaraciones de Verstrynge ha sido grande. No por la significación y el peso del personaje que las pronunció, sino porque éstas ofrecen una preciosa oportunidad a todos aquellos políticos y partidos españoles que hasta ahora no se habían atrevido a pronunciarse sobre el tema, por las repercusiones que ello podría tener en amplios sectores de la opinión pública española, muy afín a la causa saharaui.
En estas últimas cuatro décadas ningún político español – ni siquieraJosé María Aznar – se había atrevido a realizar declaraciones de este tipo, independientemente de que, en su praxis política, tanto el PSOE como el PP compartieran plena connivencia con el régimen marroquí.
En sus manifestaciones, Verstrynge se permitió agregar el pasado fin de semana que:
«La parte del territorio que el Polisario reclama entreTarfaya (Marruecos) y La Güera (Mauritania) debe estar controlado por Rabat, porque el pueblo saharaui no existe. En el Acuerdo Tripartito de Madrid de 1975 entre España,Marruecos y Mauritania se menciona «población», nopueblo«.
Para mayor escarnio, Verstrynge formuló estas declaraciones desde el territorio del Sáhara ocupado militarmente por Marruecos, enDakhla, la antigua Villa Cisneros, mientras asistía a un denominado«Foro Económico» en el que formalmente sus participantes estaban tratando «el plan de autonomía propuesto por Marruecos para el Sáhara occidental». En el encuentro estaba también presente el excanciller alemán Gerhard Schroeder, hecho que puede dar una pesquisa al lector no sólo de la importancia de lo que allí se discutía, sino también del transfondo crematístico que podía tener esa reunión.
Fue en el marco de este denominado «Foro» en el que Verstryngese pronunció favorable a la «marroquinidad» del Sáhara occidental, precisando en el mismo que:
“El debate en torno al Sahara no debería tener lugar. El territorio del Sahara es marroquí y lo fue siempre”, dijoVerstrynge en una declaración a la MAP al margen de su participación en los trabajos de la 5 la reunión anual del Foro Crans Montana, en Dakhla»
El mentor ideológico de Podemos no desaprovechó la oportunidad que le ofrecía la actual crisis política de Argelia, el país que durante decenios ha apoyado la lucha del pueblo saharaui por su autodeterminación, exigiendo que los argelinos «se dedicaran a lidiar con sus problemas políticos internos, en lugar de interferir en los asuntos de Marruecos y su Sahara”.
En un alarde de sospechoso fervor promarroquí, quien en el pasado ocupara la Secretaría General de Alianza Popular llegó a asegurar en el transcurso del encuentro que:
“Marruecos es el país que ha logrado el mayor progreso y crecimiento económico en África y está realizando esfuerzos considerables en solidaridad con los países africanos”
Una afirmación esta que resulta cuando menos extraña, pronunciada por un profesor universitario supuestamente avezado en temas relacionados con la geopolítica, teniendo en cuenta que es ampliamente conocido que el régimen monárquico semifeudal que domina ese país, no sólo juega el papel de bastión de los intereses políticos, militares y económicos de la UE y EEUU en el norte de África, sino que tiene una notoria presencia militar en los conflictos de Oriente Medio, como estrecho aliado de Arabia Saudita.
“El pueblo saharaui no existe – agregó terminante en sus declaraciones el inspirador ideológico de Podemos -, es una creación de Argelia y de una parte de la izquierda española,que lamentablemente aún no logra tomar conciencia de la situación real de este territorio marroquí”.
Atemorizados por las repercusiones que las declaraciones de Jorge Verstrynge podrían tener en estas delicadas fechas preelectorales, la portavocía de Podemos se vio obligada a realizar un desmarque fulminante del posicionamiento que sobre sobre la autodeterminación saharaui había tomado uno de sus principales mentores ideológicos.
LA BIOGRAFÍA POLÍTICA DE UN SALTIMBANQUI
Para ayudar a entender este tipo de posicionamientos, vale la pena hacer un breve recorrido por la sinuosa biografía política de este sujeto.
Como es sabido, la trayectoria política de Jorge Verstrynge ha sido siempre la propia de un genuino saltimbanqui. Durante su época de estudiante en la Universidad Complutense de Madrid, fue un notorio militante de un aguerrido grupo ultraderechista de entonces, conocido por el nombre de «Defensa Universitaria», una de cuyas dedicaciones principales era repartir hostias entre los estudiantes a los que el Régimen franquista consideraba como «subversivos» .
Integró, igualmente, otro famoso grupo neonazi, llamado CEDADE,«Círculo Español de Amigos de Europa«, conocido también por sus arremetidas violentas en contra de quienes en la década de los 70 luchaban en contra de la dictadura.
Asimismo, Jorge Verstrynge fue un rendido admirador del histórico ultra José Antonio Girón de Velasco, el que fuera un feroz halcón en la década de los 50 del gobierno del dictador, y posterior integrante del«búnker» que defendió a capa y espada las esencias espirituales del franquismo durante las postrimerías del Régimen.
Más adelante, Verstrynge pasó a militar en las filas de Alianza Popular, la organización política que presidía Manuel Fraga Iribarne, predecesora natural del actual PP, llegando a convertirse nada menos que en su Secretario General. Entre los años 1982 y 1989 fue diputado nacional por Alianza Popular.
Tras tener un enfrentamiento de carácter orgánico – que no ideológico – con Manuel Fraga, el capo di tutti capi, en 1986 abandona el partido y el grupo parlamentario de AP, fundando su propia organización, a la que denominó «Renovación Democrática».
No necesitó Jorge Verstrynge que transcurriera mucho tiempo desde el momento que se produjera su desvinculación con la figura del ex ministro franquista para que, en mayo de 1988, solicitara su ingreso en el PSOE. Ante el escándalo público que hubiera significado su automático ingreso en el partido socioliberal , la dirección del PSOE sólo se permitió abrirle sus puertas cinco años después, en 1993.
No obstante, su paso por en ese partido fue meteórica, dándose de baja poco tiempo después de que se produjera su ingreso.
A finales de la década de los 90, Verstrynge encontró cobijo político como asesor de Francisco Frutos, Secretario del Partido Comunista de España y Coordinador Izquierda Unida.
JORGE VERSTRYNGE REBOTA A LA DIRECCIÓN DEL «FRENTE CIVICO», DE JULIO ANGUITA
A través de no sabemos qué vericuetos, el voluble Jorge Verstrynge fue a dar con sus huesos en la «Coordinadora Nacional»del «Frente Cívico», un esbozo de «movimiento» del que Julio Anguitase había autoproclamado «referente». Verstrynge compartió entonces mesa y mantel en la dirección de aquelmovimiento/organización, con el propio Julio Anguita, con Pedro Montes, Víctor Ríos y el no menos voluble Manuel Monereo.
Ante sus desconcertado simpatizantes Julio Anguita trató de explicar la abracadabrante presencia de Verstrynge en la dirección de aquel «movimiento» que nunca logró moverse de donde se encontraba, de la siguiente manera:
«Yo conozco a Verstrynge desde hace mucho tiempo y he hablado mucho con él. Ya estuvo asesorando en cosas a Paco Frutos. Y es una persona curiosa por su proceso de cambio, pero para mí es muy valioso porque aquí tampoco damos puntada sin hilo, y su incorporación me permite a mí dejar claro que en el Frente Cívico a nadie se le pregunta de dónde viene sino a dónde quiere ir».
No obstante, la funcionalidad del «movimiento» que tenía como escudo «referente» a Julio Anguita – nunca se supo si tal «referencia»fue política, ideológica o personal – duró sólo unas cuantas primaveras. Y la permanencia en el mismo del saltimbanqui Jorge Verstryngeresultó igualmente efímera.
EL SALTO A PODEMOS
Aprovechando aquello de que Podemos había sido declarado una suerte de ‘híbrido ideológico» por su secretario general, Pablo Iglesias – «no somos ni de derecha, ni de izquierdas»-, Jorge Verstrynge trató de entrar en la organización por la puerta grande.
Ni que decir tiene que su nueva militancia suscitó la protesta que no pocos de los activistas telemáticos de Podemos, a quienes les resultó muy duro de tragar esa rueda.
Y es que la cosa tenía bemoles. La cantosa biografía nazi de Jorge Verstrynge no ha dejado de perseguirle hasta nuestros días. Unos lo rechazan porque no pueden olvidar, o dejar de encontrar en las hemerotecas, sus discursos ultrareaccionarios de su época de AP. Y los otros, sus propios ex correligionarios de la ultraderechona histórica, porque no les resulta posible borrar de sus memorias personales la traición de la un día fueron víctimas.
De manera que el mismísimo secretario general de Podemos se vio obligado hacer una cicerónica defensa de su ex profe de la Facultad de Ciencias Políticas, llegando a realizar públicamente una confesión entre insólita insólita y clarificadora:
«Sin saberlo, Jorge Verstrynge fue un precursor de Podemos, precisamente porque nos enseñó a pensar también desde claves diferentes a las tradicionales de la izquierda… Descubrí a un profesor y a un maestro excepcional y heterodoxo…».
Les aseguro que cuando uno llega a conocer trayectorias biográficas como la de Jorge Verstrynge, así como los razonamientos justificatorios con los que Pablo Iglesias pretendió avalarlo, nos resulta posible tener una visión cristalina sobre cuáles han sido algunos de los factores que han terminado arrastrando a Podemos a los preludios de la fase de hecatombe final en la que parece encontrarse.