El Pueblo Saharaui ha perdido la confianza en la comunidad internacional
Es objeto de constantes agresiones por parte de los paramilitares. Casi 100 días bajo arresto domiciliario sin condena judicial.
La activista saharaui Sultana Jaya lleva toda una vida enfrentándose a las fuerzas de ocupación marroquíes en defensa de la autodeterminación y de su bandera.
2017. La arrastran en su calle; un paramilitar se cruza rápido caminando sobre ella. En un vídeo que refleja la escena, casi no se percibe porque es una melé muy rápida con varios policías sobre ella, pero una foto sacada de esa grabación muestra claramente cómo ese personajillo mezquino y cobarde le clava la bota sobre su tripa desprotegida, cruza y desaparece.
En Bojador viven otros miembros de la saga Jaya. En una sala grande, vacía, reposa sobre un caballete la foto del joven Baba Jaya que murió el 1 de diciembre de 2008, víctima de un atropello intencionado ordenado por la policía. Murió otro chaval y varios quedaron heridos con secuelas hasta hoy. Eran estudiantes saharauis en Agadir que pedían un autobús para volver a su tierra. Hicieron una sentada y el autobús se lanzó contra ellos.
Lo terrible de las autoridades marroquíes es su crueldad. Pero a eso se añade su cinismo. En la cárcel de Tiflet 2 –Marruecos- el director dice no saber que Mohamed Lamin Haddi lleva 40 días en huelga de hambre. El CNDH, el Centro Nacional para los Derechos Humanos marroquí, asegura que ha ido a ver a Sultana y se ha interesado por ella. Sultana lo ha desmentido categóricamente por las redes sociales dando su teléfono y su e-mail por si alguien se quiere cerciorar con ella.
¿Será por eso que las fuerzas de ocupación le han robado el móvil? Cuando parecía que estaban levantando la mano y permitieron la visita de CODESA –Colectivo de defensores saharauis de los derechos humanos- la cosa acabó en represión. Las fuerzas de ocupación han vuelto a aislarla. Sultana inmediatamente se puso en huelga de hambre para protestar por el robo y horas después le devolvieron el teléfono pasándolo por debajo de la puerta. En ese momento dejó la huelga.
En declaraciones a la prensa argelina, Sultana denuncia cómo la represión es más feroz desde el reinicio de la guerra. Las casas son allanadas, registradas, destrozadas y saqueadas. Las personas son acosadas y maltratadas “para intimidarnos e intentar silenciarnos”. “El ocupante marroquí, con sus armas, sus torturas, su represión y sus cárceles, no nos asusta en absoluto. Esperamos todo, absolutamente todo, del ocupante marroquí. Ahora, hemos superado, y con decisión, nuestro miedo”
Sultana forma parte del colectivo ISACOM, Instancia Saharaui contra la Ocupación Marroquí, cuya presidenta, Aminatou Haidar, pide a la ONU protección para los civiles saharauis de la represión marroquí.
Sultana está amenazada de muerte por las fuerzas de ocupación marroquíes.
Buscan infligir dolor y miedo. Lo del dolor lo consiguen. Lo del miedo, no.
https://www.ecsaharaui.com/2021/02/sultana-perseguida-e-irreductible.html?m=1