El ex militante del GRAPO Fernando Silva Sande, condenado a treinta años de reclusión
La Audiencia Nacional ha condenado a 30 años de prisión al ex dirigente de los GRAPO Fernando Silva Sande como responsable de la ejecución  en 1990 del médico José Ramón Muñoz, uno de los médicos que se encargaban de la alimentación de los presos de esa organización comunista armada en huelga de hambre. En la sentencia que se ha hecho pública hoy, el tribunal, que le juzgó el pasado 22 de junio, establece también que Silva deberá pagar a la familia del médico una indemnización de 400.000 euros. Fernando Silva Sande, al que pueden ver en la fotografía, fue expulsado de los GRAPO porque sus actuaciones personales no se ajustaban a la ética de la organización. Hagan clic en "Leer más".     
El tribunal condena a Silva Sande por un delito de "asesinato en calidad de autor por inducción" a partir del testimonio incriminatorio que realizó ante la Policía y el juez de instrucción el ya condenado militante de los GRAPO, Guillermo Vázquez Bautista.
A esta circunstancia, los magistrados unen la prueba pericial practicada durante el juicio, que acredita que en la vivienda que Silva Sande ocupaba antes de su detención se encontró la pistola semiautomática marca Star que fue utilizada en esta ejecución. Durante el juicio, que se celebró el pasado 26 de junio, Silva Sande negó su participación en la muerte y aseguró que él no dio la orden de acabar con la vida del médico.
De acuerdo con el fallo, Silva Sande viajó a Logroño en marzo de 1990 para entrevistarse con los ya condenados por estos hechos María Jesús Romero Vega y Guillermo Vázquez Bautista, a quienes ordenó desplazarse a Zaragoza para matar a alguno de los doctores que tenía encomendados los  cuidados médicos de los militantes de los GRAPO y del PCE (r)  encarcelados y en huelga de hambre.
Ya en Zaragoza, Romero y Vázquez decidieron ejecutar a José Ramón Muñoz porque era el jefe del equipo y el atentado resultaba más fácil. El 27 de marzo de 1990 acudieron a su consulta, donde Vázquez le disparó a la cabeza y le causó la muerte inmediata.
En otra sentencia, la Audiencia Nacional ha condenado a 11 años de prisión a  tres militantes del PCE (r): Juan García Martín, Carmen Cayetano y María Aranzazu Díaz, por los delitos de "pertenencia a banda armada" y "falsedad documental con finalidad terrorista". Los tres, que fueron detenidos el 9 de julio de 2006 en Reus (Tarragona), fueron juzgados el pasado 29 de mayo en una vista en la que los guardias civiles que testificaron coincidieron con el fiscal en que eran dirigentes de  "la rama política de los GRAPO", según los documentos intervenidos en su domicilio.