Cuba: un VI Congreso para mejorar su Socialismo
El pasado 22 del corriente, circuló el título “[Cuba] Un VI Congreso sin perspectivas ni aliento” firmado por Manuel García Marín, en cuyo resumen se lee: “La celebración del VI Congreso del PCC, no tiene porque [sic] despertar preocupaciones nuevas o falsas espectativas [sic]. Todo seguirá igual y peor”.
Indagué sobre quién es el susodicho y encontré a alguien con esas señas, pero cuyo primer nombre es José, nacido en la Madre Patria y que como escritor se dedica a las novelas —si es la misma persona (¿?). Entonces, comprendí el porqué de sus desatinos en el mencionado título.
Confieso que hallo innecesario develar la inconsistencia de su imaginario, que él convierte en realidad tangible. Si acaso el lector (a) desea saber en qué me fundamento, invito a consultar lo que escribí al respecto recientemente en esta página en una serie de trabajos acerca del Partido Único en la Mayor de las Antillas, más otro sobre Fidel Castro (ver: http://www.kaosenlared.net/colaboradores/Noel%20Manzanares%20Blanco)
No obstante, significo que a principios de 1992 Noam Chomsky pensó que —como resultado de la catástrofe económica que vivía Cuba a causa de la caída de Moscú y del incremento del Bloqueo yanqui— era improbable que la Revolución Cubana resistiera sin alterar su esencia.
En concreto, el destacado lingüista y politólogo norteamericano llegó a sostener en los inicios de la última década del siglo pasado:
“En mi opinión, no hay nada en este momento que Fidel Castro pueda hacer para evitar que Estados Unidos se apodere de Cuba”. Aunque acto seguido aclaró: “Quizá sea una exageración”.
En correspondencia, pensé:
Si en 1992 Chomsky dudó sobre la marcha triunfal del Socialismo cubano, poco tiene de extraño que personas mal intencionadas, como el tal García Marín, adulteren cómo tiene lugar el perfeccionamiento de la Revolución en la actualidad —incluida la enhorabuena que ofrece el proceso entorno al VI Congreso del Partido Comunista de Cuba.