Costa Rica: La historia se repite en espirales
LA HISTORIA SE REPITE EN ESPIRALES. Alfonso J. Palacios Echeverría. Cuando se analiza la historia de la humanidad, o al menos la historia de occidente, lo que vemos por encima de todos los avances diversos, es una cadena sin límites de atrocidades, cometidas por los imperios que, en su momento, dominaron al mundo: el español, el francés, el inglés, y así otros, que por corto o largo tiempo ejercieron el dominio por la fuerza y la explotación más inmisericorde, en territorios enormes o más focalizados como los casos africanos, hasta el surgimiento del imperio norteamericano. Y detrás de todos estos fenómenos se encuentran actitudes y acciones que posteriormente se denominaría fascismo, al punto de significar hoy una postura bien identificada y de manifestaciones bien claras. Es decir, como señalan los rosacruces, la historia se repite en espirales, con la única diferencia de que el círculo se va agrandando en cada vuelta, ampliando el ámbito de las iniquidades a poblaciones cada vez más grandes. En el libro “Coyuntura Histórica. Estructura Multipolar y Ascenso del Fascismo en Estados Unidos”, publicado el 06 de febrero de 2013, en Barcelona, España, con la autoría de Enrique Muñoz Gamarra, se tratan temas de enorme importancia para comprender lo que está sucediendo a nivel global. Al menos, digo yo, para tener un punto de vista diferente a que nos “recetan” los medios de comunicación que dependen de las grandes agencias noticiosas, las cuales sabemos obedecen a intereses sumamente poderosos. Indica el autor, en la introducción a un artículo suyo, que ante todo es muy importante señalar que el fascismo estadounidense se impone y avanza en medio de una importante ofensiva militarista iniciado tras el (auto) atentado a las torres gemelas (11 de septiembre de 2001), pero, se concreta, como tal, a finales de 2010 en el curso de sus operaciones militares en Oriente Medio (que se le ha llamado la “Primavera Árabe”). Una ofensiva militarista que tiene tres antecedentes: Primero, la guerra de desgaste de Irán-Irak urdida por los Estados Unidos y desatada entre el 16 de septiembre de 1980 y el 22 de septiembre de 1988. Segundo, la caída de la ex URSS en 1991. Y, tercero, el desmembramiento de Yugoslavia (balcanización) que concluyó con los bombardeos criminales de la OTAN contra Belgrado del 24 de Marzo al 10 de junio de 1999 (aquí participaron más de 1000 aviones de guerra, se usaron los mortíferos misiles de crucero Tomahawk, asimismo, bombas de grafito contra el suministro eléctrico y se realizaron 38,000 operaciones de combate contra un pueblo inerme e indefenso que la Unión Europea permitió cobardemente. Y, dos fases, en pleno proceso: la primera fase se inicia con el auto atentado a las “Torres gemelas” el 11 de septiembre de 2001. Ese mismo año (2001) hay invasión de Afganistán y en 2003 la ocupación de Irak. La fase se cierra en los primeros meses de 2010. Aquí algunos hechos importantes de esta fase. Primero, el contragolpe exitoso (33 días de guerra) en agosto de 2006 del Movimiento de Resistencia Hezbollah y el pueblo libanés contra la agresión israelí y que pulverizó, para siempre, el mito sionista (se dice que aquí las fuerzas de resistencia habrían utilizado misiles anti-tanque de fabricación rusa, aunque Sayyed Nasralá, haya dicho: “Las más importantes armas con las que luchamos durante la Guerra de Julio provenían de Siria”). Segundo, el vibrante discurso del presidente ruso, Vladimir Putin, en Munich (Alemania) el año 2007 que denunció la prepotencia estadounidense, sobre todo, su escandaloso avance hacia oriente. Y, tercero, la humillación sin precedentes de las fuerzas agresoras de la OTAN-EEUU-UE por parte de las fuerzas armadas de Rusia en Georgia entre el 8 y el 12 de agosto de 2008. Fue tan contundente la respuesta rusa que en solo 5 días arrojaron a las fuerzas agresores que alegremente habían ingresado a Tsjinvali capital de Osetia del Sur ocasionando graves genocidios contra su población civil. Pero, en lo fundamental, esta fase está caracterizada, de una parte, por la expansión de la OTAN hacia el Este de Europa, con graves peligros de intervención sobre Asia Central y el Cáucaso y, por la otra, en la concreción de la Organización de Cooperación de Shangai (2001) que dio lugar a una importante alianza estratégica militar entre Rusia y China. La segunda fase corre desde finales de 2010 hasta la actualidad. Es una fase muy sangrienta, con monstruosos genocidios, realmente atroces, sobre todo, en Libia y Siria. Sin olvidar que hay uso indiscriminado de los asesinos predator en Pakistán, Yemen, Afganistán, etc. Aquí señala, muy apretadamente, algunos hechos espeluznantes que las bandas fascistas (ejército encubierto estadounidense) efectuaron últimamente en Libia y Siria. Primero, el caso del asesinato del líder libio, coronel Muammar al-Gadafi, el 20 de octubre de 2011. Segundo, lo sucedido el domingo 12 de mayo de 2013, en la ciudad de Homs, oeste de Siria, en el que, Abu Sakkar, mercenario del Pentágono (debidamente identificado por Human Rights Watch), uno de los fundadores de la Brigada Faruk, arrancaba el corazón de un soldado sirio muerto y trataba de engullírselo. Fue nítidamente observado desde un vídeo colgado vía internet. Tercero, luego, hay una infinidad de hechos espeluznantes que han ocurrido en esta región (Oriente Medio). En Siria estos hechos han ido desde ataques a barrios enteros, destrucción de iglesias cristianas, incluso mezquitas, fusilamiento de niños, etc. Sin olvidar que esto también se vuelve normal, por no decir habitual, en la otras regiones del planeta (India, Colombia, etc.), con ataques letales, genocidio manifiesto y asesinato deliberado de jefes guerrilleros. Lo último es el ametrallamiento, así sin contemplaciones de ninguna clase, de manifestantes en Egipto que se dicen ha cobrado la vida de casi un millar de personas. Algo de lo que nadie se enteró en nuestro país tiene que ver con el Acta de Autorización Nacional de Defensa, emitida en febrero de 2013, pero que se hizo público a mediados de mayo de 2013, donde se observa los excesivos poderes que empiezan a tener las Fuerzas Armadas estadounidenses al interior de este país. Es una disposición que: “Altera las leyes sobre la participación de los militares en la reinstauración del orden público dentro del país, permitiéndoles reprimir la desobediencia civil sin previa autorización presidencial, donde cualquier civil puede ser detenido por el ejército de manera indefinida…La página 16 del documento reza: “…los comandantes militares federales tienen derecho en circunstancias extraordinarias de emergencia en las que la autorización previa del Presidente es imposible y las autoridades locales son incapaces de controlar la situación, a participar temporalmente en las actividades necesarias para calmar los inesperados disturbios civiles a gran escala”. Luego vino lo del atentado del Maratón de Boston, y a raíz de ese hecho se constató algo que estaba escondido en la política interna de Estados Unidos: su condición policiaca. En efecto tras este atentado se llevó a cabo una operación nunca vista en ese país, con registros casa por casa en el espacio de cien millas cuadradas como la que acababa de realizar la seguridad nacional de los EE.UU. Exactamente después de los atentados los suburbios fueron prácticamente sellados. Sellados por la operación policial. A la gente la sacaban de su propia casa, con las manos levantadas, a punta de metralleta, y registraban sus casas. Es decir que se pisoteaban directamente todos los derechos constitucionales de los ciudadanos estadounidenses. Y a escala de una ciudad entera. Algunos observadores, incluidos tan serios como Paul Craig Roberts, quien fuera el editor de Wall Street Journal, escribieron con respecto a lo que pasó en Boston, “que ni siquiera el rey Jorge, quien combatió a la revolución estadounidense, se hubiera podido permitir dar una orden semejante a sus casacas rojas. Es decir que el país ha cambiado radicalmente en los últimos años”. Estas son informaciones suministradas por el autor, fácilmente verificables. Nada es inventado ni tergiversado para beneficio de su tesis. Y por ello resulta realmente asombroso que más de lo que nos podríamos imaginar existen personas en nuestro país que cierran sus ojos y sus mentes a estos hechos, consideran al imperio del defensor de la democracia, la libertad y la vida, y se ofenden cuando alguien señala las atrocidades que comete a nivel mundial. Ahora bien, proporciones guardadas, los anteriores imperios europeos cometieron las mismas barbaridades con poblaciones enteras (genocidio) que son ahora temas de la historia de occidente, incluyendo el imperio soviético en su momento. O sea, al parecer es una condición inherente al poder y la dominación. Y cuando el autor señala el ascenso del fascismo en los Estados Unidos de América no se equivoca, ni miente ni calumnia. Y éste es el gobierno que veneran nuestros políticos como modelo a seguir, sin la menor dignidad de seres civilizados. Por ello vemos –proporciones guardadas- algunas pequeñas manifestaciones en nuestro país, como fueron los “cercos de seguridad” alrededor de la actual Presidente, en actos públicos, imitando al anterior, que se creía a punto de ser atacado por legiones de facinerosos y se rodeaba de una gran cantidad de hombres armados, haciendo el ridículo. ¡Vamos por buen camino, dicen ellos! Pero lo triste de todo este recuento es percibir cómo, en la historia de occidente, los abusos del poder son tan comunes. En algunos casos con fuerza militar, en otros policial, en otros económica y finalmente con la manipulación de información para embrutecer a las masas Solamente queda una leve esperanza. Cuando un imperio toma el camino del fascismo es porque ya siente dentro de su propia debilidad. Luego vendrá un breve lapso de libertades, cuando fenece en medio de la exacerbación de sus atrocidades, y a continuación el surgimiento de nuevas situaciones imperiales, a manos de otras fuerzas y poderes. Al parecer somos una especie maldita, priva en nosotros lo animalesco, lo salvaje en el peor sentido de la palabra. Porque los animales, cuando matan, lo hacen para alimentarse o defenderse. El ser humano por imponer ideologías o simple placer de sentirse fuerte