Chile. Democracia burguesa y sus noticias
La dictadura del capitalismo, la vivimos aquí y ahora
Durante una semana el periodismo burgués, y los dueños de esos medios de desinformación masiva, que rinden pleitesía a la, según ellos, «ejemplar sistema democrático de Estados Unidos», dedicaron sus noticiarios a dar «cobertura a la elección más importante de los últimos años», y cada cual a su estilo, entregar la noticia de forma parcelada y como caja de resonancia de una cadena imperialista del propio «tío Sam».
Jamás dijeron que el sistema electoral de elección presidencial no es democrático, sino que es «indirecto». Los belicistas gringos imponen vía golpes de Estado, sanciones económicas, bloqueos, invasiones y guerras, su ‘flamante democracia», en cualquier lugar, si los gobernantes no son parte de sus intereses económicos.
Tampoco informaron acerca del rol nefasto y criminal tanto de los republicanos como de los demócratas, ambos partidos burgueses.
¿Informaron de lo que pasó en Bolivia?
¿Dieron cobertura 24 hrs del atentado dinamitero, que sufrió el recién electo candidato del MAS, Luis Arce? La respuesta es no, pues el interés es desinformar, tergiversar o mentir descaradamente.
Hace muchos años el sistema bipartidista Yankee, se reparte el «sillón del salón oval», de la casa blanca, desde ahí, han dirigido miles de acciones bélicas contra los pueblos y los trabajadores del mundo, bajo la excusa de defender el «american soul», el espíritu americano o «imponer la democracia, en países asolados por crueles dictaduras».
La dictadura del capitalismo, la vivimos aquí y ahora, no es retórica pretérita. Piñera se sentó junto a Trump con una bandera Yankee, en la cual ponía a la bandera chilena como parte de esa.
Los diferentes gobiernos pro imperialistas de la concertación y la nueva mayoría, solicitaban el beneplácito del gobierno Yankee de turno, para sus políticas económicas a implementar en contra nuestra.
Pero lo más curioso, es la actitud y acción de los candidatos en disputa durante su trayectoria. Un buen ejemplo lo realizado por el recién electo candidato demócrata Joe Biden, durante la guerra de las Malvinas, en 1982, cuando se dirigió al Congreso norteamericano y «presentó» una resolución política de guerra, que afectó a Argentina. Dicha resolución, indicaba que «Estados Unidos apoyaba al gobierno británico». En palabras propias del actual presidente electo, dijo ‘esta resolución busca definir de qué lado estamos, ese lado es el británico. Los argentinos tienen que sacar de sus cabezas que los Estados Unidos de Norteamérica, es neutral».
Todos conocemos la reacción que eso provocó en diversos gobiernos del mundo, incluido Chile, donde la dictadura de Pinochet se puso del lado invasor y apoyó al gobierno terrorista de Tatcher.
Para las nuevas generaciones es indispensable entender que en política nada es al azar. Así lo ha demostrado el accionar concreto del Frente Amplio, los partidos de la ex Concertación y la ex Nueva Mayoría, con el gobierno asesino de Piñera, con su apoyo a desmovilizar al pueblo, el engaño del plebiscito, la represión apoyada por ley, las medidas económicas antipopulares, prolongando la «vida del gobierno asesino». Hoy se van a presentar como independientes, como salvadores, como los más democráticos, sin embargo, su actuar pasado los condena.
En el caso del «president elect», como son denominados por tradición, Joe Biden, tuvo otra y no menor participación, siendo presidente de la comisión de relaciones exteriores del Senado, comisión que generalmente indica los presupuestos económicos para las guerras emprendidas contra los trabajadores del mundo.
Durante el año 2003, siendo presidente el republicano George Bush, Biden, a través de la comisión apoyó las «informaciones de inteligencia, que señalaban que Irak era responsable de producción y almacenamiento, de armas de destrucción masiva». Con estas mentiras, Bush inició la invasión a Irak, que luego se extendería a otras naciones.
Esa aprobación de «declaración de guerra», deja en evidencia que nada bueno para los trabajadores del mundo se puede esperar del reciente electo presidente gringo.
Pero eso no es todo, durante sus casi 50 años como senador, también el pueblo oprimido afrodescendientes de USA, sintió el rigor de su labor en favor de una minoría racista. Apoyó y promulgó la ley racista en los años 60 y durante su campaña, cuando se lo recordaron, como buen oportunista, dijo «estar arrepentido».
Muchos en diversas parte del mundo deben estar contentos con la derrota electoral de Trump, pero llamamos a no olvidar que Biden es más de lo mismo en su país y para el resto de los pueblos del mundo. Es bueno también entender que los problemas que a nivel mundial tenemos los trabajadores, no se resuelven con elecciones y que no debemos olvidar las acciones de aquellos que se presentan como «amigos». Tal es el caso en nuestro país, con las ya desatadas campañas electorales de los responsables de tanta barbarie, abuso, colusiones y la impunidad para los políticos, milicos, pacos, marinos, PDI, aviadores, patrones, jueces, ministros, diputados y senadores.
Todo los responsables de esto, insistimos, «se quieren pasar de listos», se presentarán como independientes. Pero lo peor es la situación de aquellos luchadores que caen en la trampa e irán en las «listas» de esos mismos partidos traidores, coludidos y corruptos. No olviden el actuar de la llamada «izquierda parlamentaria». Ellos han apoyado las leyes antipopulares y represivas del gobierno de Piñera, tal es el caso del Frente Amplio y ni hablar de los sinvergüenzas de la ex Concertación y la ex Nueva Mayoría.
No todo lo que brilla es oro, dice el adagio popular.
Colectivo Prensa Digital de Laguna Verde