Un millar de conductores, según los sindicatos convocantes CGT y Actub, han asistido, en el Casinet de Hostafrancs de Barcelona, a una asamblea que se ha celebrado en un ambiente reivindicativo y en la que se ha acordado continuar de forma indefinida la protesta laboral, que comenzó con un paro parcial el pasado 21 de noviembre.
Hasta ahora, el desencuentro entre una parte de los sindicatos del comité de empresa y de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha supuesto ya 15 días de huelga de 24 horas, así como otros dos días más de paros parciales en noviembre y febrero.
El presidente del comité de empresa de Autobuses de TMB, Saturnino Mercader, ha sido hoy claro al exponer a la asamblea que la última propuesta de la empresa y afirmar que no cumple las expectativas de los conductores al suponer un incremento de la jornada diaria actual, de 7 horas y 4 minutos, a 7 horas y 45 minutos, de media.
El nuevo sistema horario propugnado por TMB se añade a los dos ya existentes en la empresa, los denominados grupos 50 y 40/12, y significa tener dos días seguidos de descanso semanal –aunque solo la mitad serían en fines de semanas– y, a cambio, los conductores deberían asumir un incremento de la jornada diaria.