Argentina. 14 años sin Luciano Arruga

Por Nicolas Solo

Este domingo 29 de enero se recordó y se volvió a reclamar justicia por Luciano Arruga en el Espacio que lleva su nombre, en Lomas del Mirador, La Matanza, que funciona en la que fuera la sede del destacamento policial donde fue visto con vida por última vez el 31 de enero de 2009.

“Se cumplen 14 años de la desaparición forzada seguida de muerte de Luciano, y salvo algunas actualizaciones, podríamos hacer el ejercicio de Copiar y Pegar lo que venimos diciendo desde enero de 2009. La maquinaria de desaparición estatal, que no ha cesado desde 1983, ha cumplido con cada uno de los pasos que religiosamente ejecuta ante un crimen como el de Luciano: secuestra, mata, desparece y garantiza impunidad. Para eso, cuenta con dispositivos claros: la clase política que puebla los barrios populares de policías, la yuta que mata y los palacios judiciales que se pasan la pelota sin resolver absolutamente nada. Lo sabemos. Ustedes que nos leen lo saben. Y ellos, también”, plantearon familiares y amigos desde el Espacio Luciano Arruga.

“Seguiremos insistiendo, pese a lo implacable de la estructura criminal del Estado, en la búsqueda de justicia. Por Luciano, pero también entendiendo que en ese transitar nos hemos hermanado con otras injusticias, de todo tipo, pero con un denominador común: el Estado. En las desapariciones, en los asesinatos, en el hambre, en la pobreza, en la contaminación ambiental, en los pueblos fumigados, en la represión en cárceles y en cuanta mierda opresiva que aparezca, el Estado está presente. Gobierne quien gobierne”, declararon a 14 años de esos hechos.

“También, sabemos algo: Luciano se ha multiplicado. Y ese es nuestro objetivo primordial: no solo no olvidarlo sino que su nombre se replique. Hoy, cada espacio, cada texto, cada bandera, remera, bachillerato, cátedra, radio, cada una de las veces que Luciano Arruga sea nombrado es un triunfo para nuestra lucha cotidiana”.

“Tal vez el fuego final sea la suma de pequeñas llamas que de a poco se van encendiendo. El resultado es el mismo: arder”.

 

Fuente: Argentina.indymedia.org

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