(Uno de los nuestros) Fallece el cineasta Basilio Martín Patino
Ha muerto a los 86 años un gran artista, independiente, comprometido, crítico, rebelde, libre. Un ejemplo para los que, cada cual desde su barricada, usamos implacablemente la denuncia, la crítica y el compromiso como herramientas de identidad personal y de transformación social. Deja una espléndida obra, testimonio de su tiempo con una extraordinaria originalidad creativa. Un maestro cinematográfico. Uno de los grandes. Que la tierra te sea leve maestro!!
FALLECE EL CINEASTA BASILIO MARTÍN PATINO A LOS 86 AÑOS
El salamantino nos ha dejado un legado cinematográfico que se caracteriza por su rebeldía y libertad.
El cine español está de luto, y no sólo por haber perdido a un cineasta esencial: nuestro cine ha perdido también a una de las personalidades más libres y anárquicas de nuestra historia audiovisual. Un hombre que convirtió lo real en arte, que plasmó sus valores en la pantalla y desmostró que las películas que se realizan en los márgenes de la industria son igual (o más) importantes que cualquier ‘blockbuster’ veraniego. Basilio Martín Patino ha fallecido esta mañana a la edad de 86 años, pero no hay muerte que pueda borrar el inmenso legado que nos ha dejado.
Martín Patino nació en Lumbrales (Salamanca) en el año 1930, y el cine no tardó en ser parte inseparable de su vida. Como muchos cineastas, empezó siendo cinéfilo y crítico en una revista que él mismo creó, ‘Cinema Universitario’, de forma que acabó instigando las influyentes Conversaciones de Salamanca sobre el cine español en 1955. Pero después de debatir, hay que rodar. Su ópera prima se estrenó en el marco del Nuevo Cine Español de los años 60, y se tituló ‘Nueve cartas a Berta’ (1966). En ella utilizaba la ficción para abordar la realidad de los jóvenes españoles, con una maestría detrás de las cámaras que auguraba una prolífica carrera. No decepcionó: la década de los 70 vio una de sus más ambiciosos proyectos, la trilogía formada por ‘Canciones para después de una guerra’ (1971), ‘Queridísimos verdugos’ (1973) y ‘Caudillo’ (1974), con los que se metió de lleno en esa no-ficción que le caracterizaría más adelante y esa voluntad de esquivar las leyes de la censura con su incorruptible sistema de valores y su rabiosa independencia artística.
Su extensa carrera, que incluye otros films como ‘Casas viejas’ o ‘La seducción del caos’, culminó hace tan sólo 5 años, con el esterno de ‘Libre, te quiero’, que filmó a la edad de 81 años. Su alegato final no pudo ser más adecuado: se centró en el movimiento del 15M -en línea con su ideología-, la rodó cámara en mano -con el toque experimental que siempre le ha acompañado- y una voluntad infranqueable de mostrar la realidad a través del relato. Aunque en la salud ha sido una enfermedad degenerativa la que nos obliga a decirle adió, en lo artístico siempre caminó a su propio ritmo. Sus películas son una desmotración constante de coraje y talento. Basilio Martín Patino fue un genio inmortal y necesario para tiempos inciertos. Y lo sigue siendo.
Artículo de Fotogramas:
http://www.fotogramas.es/Noticias-cine/Fallece-el-cineasta-Basilio-Martin-Patino-a-los-86-anos