Siete tesis sobre Freud
Por Rafael Castaño Rendón
1 El hombre es un ser que se hace en sociedad. Para hacerse, el hombre necesita del sexo para reproducir la especie y el trabajo para conservarse como ente material, alimentarse. El hombre precisa, además, del aire para respirar o la fuerza de la gravedad para mantenerse en el suelo, pero son las dos primeras aquellas acciones que el hombre debe realizar voluntaria, cotidianamente, ya que, salvo en sociedades de la abundancia, no son proporcionadas por la naturaleza.
2 El sexo y el trabajo producen al hombre y permiten la sociedad, forma con la que se designa la cultura humana, su comprensión del mundo, su saber de él mismo y de los otros
3 Determinadas sociedades hacen, para el placer de una minoría, que la gran mayoría social sólo pueda dedicarse a las formas más peregrinas y burdas del sexo y del trabajo. La cultura humana es entonces reprimida, a veces de la forma más tosca : censura de libros, de la investigación social, mediass completamente manipulados, manifestaciones callejeras con multas colosales.
4 De esta forma, el sexo reprime a la cultura, que sólo se muestra en sus formas más envilecidas.
5 Freud consideró que el origen de la cultura está en la represión sexual, lo que el denominó sublimación
6 Por el contrario, cabría pensar que no es la cultura social humana, la sociedad, la que reprime el sexo, sino el sexo el que reprime el poder creador, cultural y social, humano.
7 Freud, a la postre, intentó liberar al hombre de las cadenas del sexo, colocarlo en su lugar, hacerlo un simple hecho natural, como el comer, respirar o caminar, desvelar la mitología que lo encubre, a fin de conseguir la apertura cultural, mundanal, humana. Como diría Brecht ,“ Me dediqué al amor sin atención/ y vi con impaciencia la naturaleza”.