Sánchez cede ante las críticas de la chusma y anuncia la contratación de abogados para defender a Llarena
No es que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, no sea chusma, pero es que hay más chusma que él, todavía, que ya es decir.
Así, luego de anunciar que su Gobierno no gastaría un duro en la defensa del juez Pablo Llarena (que debe de afrontar una demanda en Bélgica presentada por el Govern en el exilio), las fuertes críticas que su postura había generado a cargo de la caverna mediática, diferentes asociaciones de jueces y fiscales, así como los partidos políticos que se pronunciaron sobre este asunto, Sánchez se lo ha pensado mejor y ahora dice que contratará abogados para defender al citado juez.
Lo ha difundido mediante una nota de prensa en la que el Gobierno español ha defendido que ha actuado con “total diligencia”, poniendo en marcha “todos los mecanismos necesarios para la defensa de nuestra soberanía jurisdiccional”.
El Ejecutivo de Sánchez asegura que ha contratado un despacho de abogados en Bélgica para defender los intereses del país, y que atenderá las peticiones “de salvaguarda de la soberanía jurisdiccional española” que en el futuro pueda realizar el Poder Judicial.