Rodrigo Lanza: “Que el caso 4F sirva para recordar que hay mucha gente que no tiene voz”
Este pasado jueves se presentaba en Barcelona ‘Ciutat Morta. Crónica del caso 4F’, un libro colectivo y autoeditado que pretende que los hechos que ocurrieronhace diez años en la calle Sant Pere Més Baix no se olviden.
El cuatro de febrero de 2006 se produjo un enfrentamiento entre la Guardia Urbana y un grupo de jóvenes que intentaban acceder a una fiesta en un local ocupado propiedad del Ajuntament. Del enfrentamiento un agente acabó tetrapléjico a causa del impacto de una maceta, aunque la versión oficial que se dio después dijo que se trataba de una piedra.
Por este suceso, la Audiencia Provincial de Barcelona condenó a Rodrigo Lanza a cuatro años y medio de prisión, a Álex Cisternas y a Juan Pintos, a tres años y tres meses y a Patricia Heras le cayeron tres años. Heras pasó dos meses en prisión y cuatro meses en régimen de tercer grado. El 26 de abril de 2011 se suicida.
El juicio fue denunciado por múltiple irregularidades. La única prueba de la acusación se basó en el testimonio de Bakari Samyang y Víctor Bayona, dos guardias urbanos que después serían condenados por tortura y simulación de delito. Ante esto, la defensa recurrió las penas. El Tribunal Supremo, en junio de 2009, aumentó la pena de cárcel a Lanza hasta los cinco años, condena que cumplió integra.
Ahora están pendientes de la respuesta del Tribunal Constitucional y del Tribunal Europeo de Derechos Humanos de Estrasburgo., con la esperanza de que reabra el caso y se puedan demostrar las falsedades del caso y las torturas recibidas.
En la presentación ha estado presente la madre de Rodrigo Lanza, Mariana Huidobro, para la que el libro nace simplemente“para contar la verdad”. Es una crónica de “diez años de lucha cotidiana y continua. Nace de la necesidad de hablar, de dar a conocer la mierda de documentos que hicieron los jueces y la policía”. “Quizás me caiga un marrón encima por lo que digo. Ojalá sea así y reabran el caso”.
Durante todos estos años Mariana ha recibido el apoyo de muchas personas, pero ella también se ha convertido en un símbolo de lucha y resistencia para muchas otras. Por eso, el libro nace también “como herramienta de lucha para otros casos”.
En la presentación también ha estado Rodrigo Lanza, que se ha emocionado al recordar el tiempo que ha pasado en la cárcel: “Me siento obligado a hablar por mí y por todos los demás. Hay heridas que no se cierran nunca”. Lanza ha querido transmitir que el sentido del libro es “que el caso 4F sirva para recordar que hay mucha gente que no tiene voz”, en referencia a las personas que están encarceladas injustamente.
Andrés García Berrio, autor del epílogo, ha destacado la necesidad de que exista voluntad política para que casos como este no se vuelvan a repetir. García ha aprovechado para anunciar una campaña, junto con Mariana Huidobro, para visibilizar qué sucede en las cárceles y centros de internamiento, a través del Centro para la Defensa de Derechos Humanos Iridia en el que participa con Mariana Huidobro.
El acto, en el que se ha hecho un emotivo homenaje en recuerdo de Patricia Heras,contó con la presencia de diferentes grupos y asociaciones en defensa de los derechos humanos y civiles, como Madres contra la Represión, la Xarxa Anti-Repressió de Familiars de Detingudes, la Assemblea de Familiars per la Llibertat de les Persones Condemnades pels fets del Parlament entre otras.
Para Helen Torres, otra de las autoras, el libro tiene un sentido claro: “La memoria está escrita. Ya que no se ha hecho justicia, se sabrá qué se ha hecho”. Todas aquellas personas que de alguna manera han participado en el libro desean que se sepa toda la verdad y que casos como el de Rodrigo Lanza no vuelvan a repetirse. Como ha destacado Mariana, para “que mi experiencia también les sirva”.