Noticias Uruguayas 8 octubre 2015
¿Conflictos gremiales de alto riesgo?
Por Walter Martinez
Creo que uno de los aspectos más novedosos del conflicto de la Enseñanza fue la irrupción de los jóvenes liceales involucrándose. Con desniveles pero con originalidad que no siempre abunda, pudimos ver como estudiantes sacaron sus asientos a la puerta de su liceo como en el Zorrilla o el Dámaso.
En 18 de Julio frente a un centro de Enseñanza, colgaron una reproducción del cuadro de Paul Cezzanne, Los Jugadores de Cartas, donde se trucaba los rostros de los jugadores,colocando la cara Tabaré y Astori jugando la partida y en las cartas los porcentajes en disputa.
Cualquiera que entre al IAVA, ícono de la enseñanza pública, podrá ver rápidamente la presencia gremial, cartelera de actividades, cartelitos pegados promoviendo consignas, cajas donde invitan a donar libros, ciclos de cine, el instituto está impecable, en sus escalinatas hay muchachos haciendo música con guitarras y cajones peruanos de manera casi permanente en las tardecitas. Se puede ver al gremio estudiantil allí y también ocuparon el centro durante el conflicto.
No fue pareja la forma de participar en todos los liceos, ni respondió a miradas tácticas homogéneas pero creo que un paso importante se dio. Los estudiantes son sujeto y no objeto de educación.
Dentro de este marco ocuparonel edificio donde funciona elCodicen y otras oficinas públicas. Podremos calificar de distintas maneras pero los muchachos ocupantes llamaron la atención. Empezaron su medida sin romper nada y sin estridencias, como hicieron algunos gremios cuando entraron de” pesado” en oficinas públicas gritando consignas y grafiteando.
Presentaron plataforma, solicitaron ser recibidos y terminaron reuniéndose con legisladores para discutir los reclamos. No sé cómo les iría a esos liceales en las pruebas PISA, de lo que estoy seguro es que con su presencia demostraron un nivel de involucramiento que deberíamos aplaudir. Este mundo tan adulto del Uruguay de hoy infantiliza a los jóvenes y luego les exige conductas que no estimula.
Cuando se crean ámbitos adecuados los jóvenes responden. Está muy bien que se politicen, que discutan sobre los porcentajes para la educación y que reclamen y luchen.
En nombre de lo correcto o de lo que debe ser se podrá escandalizar sobre la ocupación pero como dilucidar conflictos, como canalizar las formas de protesta a ámbitos de diálogo primero y acuerdo después es parte necesaria de la convivencia democrática y me parece que es a los adultos a los que le cabe más responsabilidad para ello.
Las acciones multitudinarias más importantes de los últimos tiempos, de más impacto y más logros han tenido a los jóvenes como protagonistas.
El NO A LA BAJA, interpeló a la sociedad uruguaya de manera fantástica, fue la juventud uruguaya la que sacudió nuestra sensibilidad e hizo retroceder al miedo conservador.
Año a año las Marchas del Silencio nos convocan a miles en torno a Verdad y Justicia, sin embargo la de este año tuvo características singulares. Como respuesta a las infelices declaraciones del Ministro de Defensa, los jóvenes participaron como nunca dando al silencio una contundencia impresionante. Los jóvenes se involucran, participan y generan respuestas contundentes.
Las Marchas de la Diversidad son andanadas de alegría, tolerancia y color. Cuestionan a nuestras pacatas miradas y de manera pacífica van formando opinión primero, cultura adquirida luego. Me pregunto si no será éste el germen por donde crezcan y se desarrollen hombres y mujeres más libres y tolerantes. Creo firmemente que quienes participan de estas fiestas de Diversidad nos educan en contra de la violencia de género y la discriminación, esos males que parecen endémicos e inmodificables en nuestra sociedad.
Con una eficacia que asusta, la ocupación del CODICEN fue un acto juvenil de protesta hasta que el mundo adulto de hoy intervino. Nuestro Ministro que parece que no hubiera nacido a la política como joven libertario y revoltoso hizo un despliegue policial que hizo el deleite de las cámaras de televisión. Irma, gran estrella mediática intervino, gremios y organizaciones solidarios y combativos con abogado extrovertido incluido, se encargaron desde el otro lado de darnos una buena batalla mediática donde palos, piedras y lastimados hicieron el deleite de los televidentes y se extendió por varios días.
No evitaron el desalojo, y habilitaron una vez más a la judicialización delconflicto. Los procesados con las tremendas 200 horas comunitarias giran por las redes demostrando lo salvaje del sistema.El ministro muestra con videos de elaboración propia lo bien y racionalmente que actuaron las autoridades.
Lo que está en disputa, o en cuestión, o sea, como se distribuyen los dineros públicos en la nueva ley de presupuesto quedó escondido en la buena dosis gráfica de conflicto entre policías y manifestantes.
Fracasamos en la resolución del conflicto, hasta escuché o leí, ya ni me acuerdo, la conducta artera de los estudiantes que aparentemente cambiaban la plataforma reivindicativa durante el proceso de negociación evitando concluirlo.
Parece poco serio pensar que no se puede encontrar una manera sensata de dar fin a una ocupación de un edificio público. Estaban atrincherados allí ¿musulmanes radicales? ¿Extremistas de alguna causa violenta?…pues no, aproximadamente 30 adolescentes mantenían la ocupación.
En los sucesos del Codicen estuvo en discusión que tipo de democracia queremos, que tipo de democracia somos capaces de construir. Ya nos acostumbramos a las escenas de violencia en los espectáculos deportivos, donde barras bravas se enfrentan y la policía actúa en consecuencia. Ya nos acostumbramos a “los partidos de alto riesgo”.
¿Vamos ahora por los conflictos gremiales de alto riesgo?
Por Walter Martinez
Columnista uruguayo
La ONDA digital Nº 739 (Síganos en Twitter y facebook)
Los gráficos de Gabriel «Saracho» Carbajales
La educación como derecho
Columna de opinión.
En la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación nos gusta pensar nuestro trabajo desde la consiga “Un compromiso con los derechos humanos”. La frase define claramente lo que pretende ser, a la vez, un posicionamiento académico, ético y político, en el más amplio sentido de estas palabras.
La educación, en sus múltiples manifestaciones teóricas y prácticas, constituye el centro del trabajo cotidiano de quienes nos desempeñamos en el Instituto de Educación de la facultad. Si bien el espacio académico que nos nuclea surgió a pocos años de haber comenzado la oscura noche dictatorial, la preocupación por la educación y por la pedagogía nos viene desde nuestros inicios como facultad a través de la obra de don Carlos Vaz Ferreira.
El presente nos encuentra en medio de un proceso de desarrollo académico que se refleja en la existencia de diversas y pujantes líneas de investigación, el desenvolvimiento de variados proyectos de extensión universitaria -en los que se hace patente el trabajo conjunto con diversos actores de la educación formal y no formal- y una práctica de enseñanza que nutre a la Licenciatura en Educación, a diversos ámbitos de posgrado de la Universidad y que el año próximo se plasmará en el inicio del dictado en nuestra casa de la Maestría en Ciencias Humanas Opción Teorías y Prácticas en Educación.
Uno de los elementos que atraviesa fuertemente muchas de las acciones de producción de conocimientos en las que participamos es la promoción del derecho a la educación en sus más amplias expresiones.
El sistema educativo uruguayo produce resultados fuertemente vinculados a los niveles socioeconómicos de los que provienen sus estudiantes. Sin entrar a explicitar aquí datos estadísticos ampliamente conocidos, bastará simplemente con señalar que en lo que tiene que ver con la finalización de la enseñanza media superior, un estudiante perteneciente al quintil más rico tiene diez veces más chances de lograrlo que un estudiante del quintil más pobre. Ello obviamente repercute en el acceso a la educación superior, que se encuentra también fuertemente estratificada en términos socioeconómicos.
De acuerdo con lo señalado en el párrafo precedente, resulta claro que el sistema educativo uruguayo, en toda su extensión, funciona reproduciendo y naturalizando las desigualdades sociales que existen en la propia sociedad de la que forma parte. Ello no es resultado de ninguna conjura maquiavélica existente entre algunos que militarían cotidianamente a favor de la desigualdad, sino que, por lo contrario, se da pese a todos los intentos, desarrollados en las últimas décadas, de ir en contra de esa desigualdad.
Quizá haya llegado el momento de interrogarnos acerca de por qué, más allá de nuestras buenas intenciones, la educación uruguaya continúa produciendo desigualdad. Seguramente una de las primeras cuestiones a despejar es si es posible hacer responsables a los que fracasan por su situación o si deberíamos colocar en el centro la responsabilidad política del Estado. Nuestra Ley de Educación (18.427) es muy clara al respecto: “El Estado garantizará y promoverá una educación de calidad para todos sus habitantes, a lo largo de toda la vida, facilitando la continuidad educativa” (Art. 1º).
Los trabajos de investigación de varios de los equipos del Instituto de Educación nos han llevado a insistir en los últimos años en un aspecto que nos parece relevante para intentar construir nuevas formas de abordaje del problema. Me refiero en concreto a la forma en que se visualiza al educando, sujeto de la educación, al momento de concebir las políticas e intervenir en las prácticas educativas.
Nuestro trabajo se ha desarrollado en los últimos años teniendo en cuenta un cuestionamiento que ha introducido en el debate pedagógico el filósofo francés Jacques Rancière. En sus términos: “Se trata de saber si el mismo acto de recibir la palabra del maestro -la palabra del otro- es un testimonio de igualdad o de desigualdad. Es una cuestión política: se trata de saber si un sistema de enseñanza tiene por presupuesto una desigualdad que ‘reducir’ o una igualdad que verificar”.1
El discurso sociopedagógico imperante, que en los años 90 se agrupaba en torno al significante “equidad” y hoy lo hace vinculado al de “inclusión”, ha estado volcado hacia la primera de las posiciones enunciadas por Rancière. Según esta perspectiva, la educación sería el principal ámbito de lucha contra las “desigualdades de origen” de los sujetos. Un elemento sobre el que quizá no hemos reflexionado lo suficiente tiene que ver con considerar cuánto incide en los resultados de nuestras políticas educativas ese punto de partida que nombra al otro como desigual, ubicando la fuente de esa desigualdad en la “idealidad distante del origen”, como diría Michel Foucault. Es desde esta perspectiva que se ha producido la actual configuración del sistema educativo uruguayo.
Estoy convencido de que si alteráramos esa noción sobre el otro y su ontológica desigualdad, pasando a considerar que en lo que se encuentra es en una situación material de desigualdad, estaríamos en condiciones de reubicar la noción democrática fundamental, aquella que señala al otro como un igual, más allá de la situación en que se encuentre en un momento determinado. En términos pedagógicos, considerar al otro un igual es apostar a concebir la tarea educativa como un permanente esfuerzo por trabajar en función de verificar cotidianamente su capacidad de aprender, tanto como cualquier otro miembro de la especie.
Reivindicar esta forma de concebir la igualdad no niega reconocer que las situaciones materiales de existencia condicionan las posibilidades de desarrollo de los sujetos. Simplemente se basa en resistirse tenazmente a creer que el presente necesariamente es una condena y a reivindicar que solamente hay trabajo educativo si se parte del reconocimiento de las capacidades y potencialidades de un otro. Así educar, más que incluir, podría ser una práctica de la libertad o una política de la justicia. Valdría la pena intentarlo.
El autor
Martinis es licenciado en Ciencias de la Educación. Magíster y doctor en Ciencias Sociales con mención en Educación. Profesor agregado y director del Departamento de Pedagogía, Política y Sociedad. Coordinador del Instituto de Educación (FHCE). Investigador Nivel I del Sistema Nacional de Investigadores.
. Rancière, Jacques (2007). El maestro ignorante. Cinco lecciones sobre la emancipación intelectual, Buenos Aires, Libros del Zorzal; p. 10.
Pablo Martinis – La Diaria
Entregarán Premio Noel Nicola a Daniel Viglietti (+ Video)
El miércoles 7 de octubre de 2015 se entregará por primera vez el Premio Noel Nicola, creado por el proyecto iberoamericano Canto de Todos, el Festival Catalán de Canción de Autor Barnasants y el Instituto Cubano de la Música, en honor al fundador del Movimiento de la Nueva Trova.
Será otorgado a Daniel Viglietti, trovador uruguayo, cuya obra y consecuencia cultural ha dejado huella en nuestros pueblos iberoamericanos.
La ceremonia, acompañada de un concierto, será a las 5:00 pm en la Sala Guevara de la Casa de las Américas, el mismo lugar donde se realizara aquel Festival de la Canción Protesta en 1967, generado por Haydée Santamaría.
Daniel Viglietti – Canción para mi América (Álbum completo)
ES LA PROPUESTA DEL FA PARA LA EDUCACIÓN PÚBLICA
Gremio de profesores considera insuficiente reasignación de recursos para la ANEP
Publicado el Miércoles 7 octubre de 2015 , 6:00am – La República uy
En ese marco, el secretario general de Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), José Olivera, sostuvo que esa propuesta de los legisladores, si bien mejoraría en $475 millones los dineros para Inicial, Primaria, Secundaria y UTU, aún “es insuficiente”.
El dirigente destacó que “es importante el esfuerzo pero poco el resultado concreto”, y justificó que “cualquier esfuerzo es pequeño si se considera la brecha entre la propuesta inicial del Poder Ejecutivo y la de los gremios”.
Olivera fue más allá, al señalar que “habrá que ver cómo impacta en el presupuesto global de la educación, creemos que el impacto será muy menor porque aquí la discusión central es que se sigue estando lejos de alcanzar en el quinquenio el comprometido 6%”.
Recordemos que el pasado fin de semana, el sindicato de profesores liceales de todo el país, Fenapes, resolvió efectuar un paro nacional de 24 horas con movilización para el día en que se vote el presupuesto en el Parlamento, medida que es acompañada por todos los gremios de la educación pública, e incluso de la Universidad de la República, y de los estudiantes.
Olivera enmarcó la medida en la reivindicación general aunque destacó el “chantaje político planteado por el ministro de Trabajo al Parlamento en la consideración del artículo 619”.
El citado artículo condiciona la asignación de partidas salariales al cumplimiento de un convenio por parte de los trabajadores, que establece, entre otros puntos, compromisos de gestión y limita la posibilidad de tomar medidas gremiales.
Funcionarios de la UdelaR
En la mañana de hoy, a partir de la hora 9, la Agremiación Federal de Funcionarios de la Universidad de la República (Affur) realizará un plenario ordinario donde definirá –entre otras acciones- si se suman a la movilización nacional de la educación pública prevista para el día en que se vote el presupuesto en Diputados, lo cual sería el 14 de octubre.
Imprevista fractura interna en el Frente Amplio
El que, de aquí en más, intente explicar la interna del Frente Amplio dividiéndola puramente entre «astoristas» y «mujiquistas» se verá obligado a un mayor esfuerzo. Porque la resolución del Presupuesto rompió, al menos por el momento, la alianza tradicional entre el Movimiento de Participación Popular (MPP), el Partido Comunista, la lista 711 y a los «removedores» del Partido Socialista.
Además, por arte de la necesidad mutua, los típicos rivales en la fuerza política tricolor -el MPP y el Frente Líber Seregni (FLS)- se unieron imprevistamente haciendo jugar su peso como principal fuerza parlamentaria, el primero, y como ejecutor de la política económica del presidente Tabaré Vázquez, el segundo.
El detonante principal de estos revalúos internos fue el Sistema Nacional de Cuidados donde el MPP del expresidente José Mujica y el FLS del ministro de Economía Danilo Astori decidieron meter mano para vestir otros santos del Presupuesto (ver página 2).
Pero también hubo reordenamientos sin precedentes en asuntos vinculados con las Fuerzas Armadas y el Ministerio del InteriorEn este cambio e intercambio de intereses no resulta raro que aquellos que terminaron aliándose para sacarle plata al sistema de cuidados, fueron quienes empezaron más enfrentados en las negociaciones por el Presupuesto.
El astorismo no quería tocar ni un solo peso del dinero previsto por el Poder Ejecutivo. En el otro extremo, el mujiquismo había detectado unos $ 1.915 millones pasibles de ser reasignados.
Pesos más pesos menos, la lista 711 y el Partido Comunista se sumaron al reclamo del MPP en tanto que el Partido Socialista navegaba a media agua tironeado por los oficialistas «renovadores» y los más opositores «removedores» u «ortodoxos».
Resulta ocioso recordar las cosas que se dijeron y gritaron las partes en pugna en el camino hacia un acuerdo. El MPP, la lista 711 y el Partido Comunista debatían agriamente con el FLS, en tanto que los socialistas discutían entre ellos. Nada nuevo. Hasta que, a poco de andar, los viejos acuerdos se fueron desflecando.
Cuando comunistas y socialistas propusieron sacarle algunos millones al Ministerio de Defensa, la lista 711 del vicepresidente Raúl Sendic reaccionó argumentando que se verían perjudicados los sectores pobres vinculados con las Fuerzas Armadas.
En ese sentido, no era extraño escuchar por los pasillos del Palacio Legislativo a diputados del interior preguntando a dónde irían a parar los soldados que quedaran en la calle por el cierre de algún cuartel. Otro de los choques de viejos aliados ocurrió cuando el PS «removedor» y el PCU propusieron recortar gastos en el Ministerio del Interior que encabeza Eduardo Bonomi (MPP). El sector de Mujica se opuso de forma terminante a sacarle dinero a esa cartera.
Finalmente, la decisión de reducir $400 millones del Sistema Nacional de Cuidados unió a Mujica y a Astori, en tanto que la lista 711 se ubicó en una posición intermedia -propuso recortar $72 millones de pesos-. Comunistas y Socialista rechazaron ese cambio de destino.
Asimismo, el traspaso de la Policía Caminera a la Guardia Republicana fue resistido por el PS y el PCU, mientras que el «astorismo» y el «mujiquismo» se unieron en su defensa.
Como se verá, nadie previó que la reasignación de apenas 5% de aumento de los gastos del Presupuesto -una nada en la economía de cualquier país- iba a propiciar tanto cambio político.
interna del fa
Cruce por Sistema de Cuidados y acusaciones de «perfilismo»
Luego de una larga discusión que llevó casi todo el día del sábado, la bancada de diputados del Frente Amplio acordó por mayoría redistribuir $ 700 millones en el Presupuesto, de los cuales $ 400 millones se le quitará a lo que originalmente se le había asignado al Sistema Nacional de Cuidados (SNC).
Socialistas y comunistas se mostraron contrarios a quitar recursos destinado a políticas sociales.
El diputado Gonzalo Civila, (Partido Socialista), sostuvo esta mañana en Inicio de Jornada de radio Carve que desde su sector van a “respetar la decisión mayoritaria de la bancada”, pero aclaró que “la decisión política era reasignar y discutir de dónde se sacaban esos fondos».
«Y no nos parece que sea bueno sacarlos de políticas sociales, como el SNC”, sostuvo y añadió que no comparten que no se haya tocado “la política fiscal ni las vinculadas a la seguridad”. Con esto, según el diputado socialista “se da una señal política de afectar una de las prioridades del gobierno”, que ante esta situación “va tener algunas dificultades en torno a la universabilidad de la política”.
Tanto el Partido Socialista, el Partido Comunista, el IR, el Partido por la Victoria del Pueblo (PVP) y la Liga Federal se opusieron a la propuesta, votada por la mayoría de la bancada.
Civila sostuvo en declaraciones a Televisión Nacional que «resentir» en $ 400 millones al SNC «es un grave error político».
«Confundir discrepancias con perfilismo».
Esta mañana los diputados del Movimiento de Participación Popular (MPP) Sebastian Sabini y Daniel Caggiani, salieron al cruce mediante sus cuentas de Twitter ante estas posturas que critican la redistribución de los recursos.
Sabini aseguró: “Yo creo que priorizar recursos en Educación, Cultura, Ciencia y Tecnología nunca puede ser una mala noticia”. y agregó que «El SNC sigue en todos sus términos: cuenta con 800.000.000 millones de pesos en 2016 y 1.200.000.00 en 2017».
Y añadió: “Vamos a ampliar a cuarenta liceos de tiempo extendido ¿no es eso una prioridad de todos los uruguayos?”.
Caggiani, por su parte, se preguntó: “¿A alguien sensato le puede parecer que redistribuir recursos para los gurises más embromados es equivocado?”.
Y continuó, diciendo que “existen opiniones diversas”, pero “lo bravo es confundir discrepancias con perfilismo. Lo primero ayuda a construir lo otro es pescar en la pecera”.
A partir de las 13 horas de hoy lunes la Comisión de Presupuesto comenzará a votar la ley y la discusión se extenderá por lo menos por tres días.
LA VIDRIERA IRRESPETUOSA
OPERACIÓN DESALIENTO Y UNA AMENAZA VELADA
por Hugo Bruschi en el Año contra la Impunidad
El reciente «hallazgo» de la Justicia en casa del fallecido ex-militar E. Castiglioni, ha despertado espectativas entre quienes seguimos en la búsqueda de datos, que nos permitan llegar hasta nuestros hermanos desaparecidos. Dichas espectativas tal vez respondan más al orden de la voluntad y los deseos, que al de la realidad. Aún así, jamás rechazaremos a priori cualquier oportunidad por insignificante que parezca, de conocer datos que nos puedan ayudar a recomponer este rompecabezas.
Al momento de escribir estas reflexiones, 6/10/15, leemos en El Observador unos comentarios del Sr. Gabriel Pereira que no pueden pasar inadvertidos para nadie. Mucho menos para la Justicia, el Poder Ejecutivo y el Poder Legislativo. En dichos comentarios se mencionan cosas muy graves que el Pueblo tiene derecho a conocer y será deber de los poderes correspondientes, arrojar claridad sobre los mismos.
«Es muy poco probable que la documentación tenga datos relevantes» dijeron al Observador «varios ex-oficiales que trabajaron en inteligencia». Es evidente a todas luces que esta información de ser cierta, tiene toda la intención de rebajar las espectativas y de algún modo decirle a la Justicia que no pierdan el tiempo. Esta gente sabe más de la cuenta…… Luego agregan que «los documentos que Berruti no encontró (OCOA) fueron hechos desaparecer por el Ejército. Es evidente que las fuentes del Observador algo saben y a esta altura la búsqueda en cuestión sólo será una pérdida de tiempo y un gasto innecesario de horas extras. Pero la información también da cuenta de otros aspectos, de los que no sospechábamos. «En la DGDI, luego DINACIE quedó información de escasa relevancia, como por ejemplo registro de vicios y comportamientos de algunos dirigentes políticos» agregando más adelante «que hay algo que está causando preocupación y es el nombre de los informantes, algunos de los cuales son personas allegadas a la izquierda y cuya tarea no terminó con el fin de la dictadura, sino que continúan en el presente». Luego sigue con el relato. «Tanto DINACIE como el Serv. de Inteligencia del Ejército manejan fondos con los que se paga a los informantes». Más adelante nos dice que» un militar retirado dijo que esa información estaba en poder de E. Castiglioni, pero que los informantes pueden permanecer tranquilos, dado que en los recibos de pago sólo figuran con el apodo».
A esta altura de los acontecimientos, deberemos reconocer que El Observador maneja información que la Justicia desconoce y por tanto tendría que ser convocado a aportar lo que sabe. El país entero tiene derecho a saber que es lo que está pasando y en que se destinan los dineros públicos. Pero no somos ingenuos: esto no es más que un burdo intento de desorientar la búsqueda, una suerte de operación desaliento y por sobre todas las cosas hacerle saber al mundo político, que poseen información sobre ellos y que por lo tanto no les conviene hacer demasiado ruido con el «hallazgo» en casa de E. Castiglioni.
Amparado en el secreto periodístico que progege a la fuente de información – cosa en la que creemos y defendemos – El Observador no proporcionará el nombre de los ex-oficiales así como tampoco del militar retirado. Tampoco nos dirá si fueron ellos quienes tomaron contacto con el diario o si fue al revés. La Vidriera cree en la primera opción y conociendo como entiende El Observador el periodismo, estamos casi seguros que así fue. Pero aquí existe la voluntad inequívoca de dejar un mensaje bien claro a «quien corresponda»: Miren que sabemos mucho, mucho más de lo que Uds. imaginan. De otro modo no tendría sentido esa revelación sobre los pagos a informantes.
Como quiera que sea, tanto unos como otros manejan información que la Justicia y los otros poderes del Estado desconocen, por lo que no estaría demás que alguien preguntara por lo menos, de que se trata todo esto. DE LO CONTRARIO, SEGUIREMOS EN MANO DE ALGUNOS POCOS DE CADA BANDO, QUE TIENEN LA VERDAD SECUESTRADA Y LA EMPLEAN COMO REHÉN