Noticias Uruguayas 4 septiembre 2015
Pentágono asegura que 58 presos de Guantánamo permanecerán encerrados indefinidamente // 3.200 marines yanquis desembarcan en Perú en medio de protestas populares // Ex jefe de la CIA propone colaborar con Al Qaeda en Siria // Snowden: Bin Laden sigue vivo y reside en las Bahamas // Refugiados, entre la espada y la pared // Grecia:Tsipras, con la política por delante // España:200.000 personas se manifiestan en Vigo en defensa sanidad pública // En México desaparece una persona cada dos horas // Guatemala: Prisión para el expresidente de Guatemala // Uruguay: Ferreira y Luppi:»Amodio es ante todo un traidor…traicionó al Uruguay entero…en preparación del Golpe de Estado» // Debate en TV (videos y análisis):Fasano desenmascaró a Amodio // Trabajadores de la salud privada están de paro // Barneix sepultado con honores y ante varios generales
Se continúa constatando que «la verdad de Amodio» ha sido y és una operación de enchastre financiada por la derecha y la ultraderecha y quién sabe por que otros más que han operado en las sombras. El objetivo fué presentar al traidor como portador de «la verdad» para hacerlo un elemento creíble. El cúmulo de mentiras, ridículas y mal expuestas, han dejado al desnudo no solo la catadura del traidor sino que además es un incapaz. Lo que pretendía ser un «ajuste de cuentas histórico» contra los tupamaros sostenido en una versión «desde dentro» que supuestamente aportaría Amodio, ha derivado hacia lo que realmente está en el fondo: no solo la entrega de militantes, el asesoramiento al más criminal instrumento de la represión la OCOA, sino que y fundamentalmente, el traidor compró su libertad a cambio de ser una pieza clave en los preparativos del golpe militar de 1973. Lo que coloca su «verdad» en otras dimensiones ya que no se trata de una asunto interno del MLN sino de trabajar para el golpe militar. Como lo expresan Juan Raúl Ferreira y Carlos Luppi: «traicionó al Uruguay entero… ya que alentó y trabajó junto a malos militares en la preparación del Golpe de Estado».
Fasano desenmascaró a Amodio Pérez
Fasano obtuvo la confirmación por parte de Amodio, de que éste escribió en mayo de 1972, mientras estaba trabajando para los militares, para salvar su vida y la de su compañera Alicia Rey Morales, un libro donde demostraba las falencias de la organización MLN y acusaba a las figuras de la oposición a los gobiernos autoritarios de Jorge Pacheco Areco y Juan María Bordaberry, de tener contactos con la subversión tupamara, lo cual, como bien aclaró el periodista “era el pretexto que los militares esperaban para dar el golpe de Estado”, cosa que finalmente lograron el 27 de junio de 1973.
El periodista y el extupamaro fueron amigos y se distanciaron de manera irreconciliable hace 40 años. En Código País volvieron a verse cara a cara.
VEA LOS VIDEOS:
Código País: debate entre Héctor Amodio y Federico Fasano parte 1
. https://youtu.be/fJxmiW0-sr4?list=PLTKB7YBnat9A_LlA8I_y0GCPPvBj6Ok0J
Código País: debate entre Héctor Amodio y Federico Fasano parte 2
https://youtu.be/vSecNamEeNs?list=PLTKB7YBnat9A_LlA8I_y0GCPPvBj6Ok0J
.
Héctor Amodio Pérez y Federico Fasano fueron compañeros de militancia sindical en el diario BpColor en los años 60, Amodio como gráfico y Fasano como periodista. Se hicieron amigos y se dividieron poco después en caminos diferentes dentro del ambiente político agitado de la izquierda nacional de esos años: Amodio como integrante del Movimiento de Liberación Nacional-Tupamaros y Fasano como líder de un grupo de diarios de izquierda que apoyaron varias de las operaciones tupamaras.
En 1972, Amodio Pérez fue capturado y se lo acusa de haber comenzado entonces a colaborar con los militares, una traición al movimiento que había integrado. Poco después, le propuso a Fasano la publicación de un libro en que daba su versión de los hechos. El periodista recibió el manuscrito y decidió no publicarlo, sino en lugar de eso llevarlo a líderes de la oposición como Wilson Ferreira y Líber Seregni, ya que en sus propias palabras en ese texto Amodio “entregaba” a sus excompañeros y a un grupo de legisladores contrarios al gobierno y al golpe de Estado que se avecinaba.
Este miércoles en Código País, ambos volvieron a verse cara a cara por primera vez en 40 años en un debate fundamental para comprender la historia reciente.
Amodio fue quien abrió. Aclaró que acudió libremente al programa y sin pedir permiso a la Justicia que lo está investigando por denuncias de abuso y tortura por 28 mujeres presas políticas durante la dictadura. El extupamaro afirmó que regresó al país tras haberse exiliado cuatro décadas atrás para contar su historia, y no pudo hacerlo como quería por culpa de la intervención del Poder Judicial. “Yo quería un enfrentamiento precisamente con Fasano con testigos”, dijo. “Yo me tengo que referir a él con el aspecto que mejor lo conozco: un grandísimo manipulador de la opinión pública”. Agregó que según él Fasano estaba allí gracias al permiso del ministro de Defensa Eleuterio Fernández Huidobro y el expresidente y actual senador José Mujica, y que lo que le estaban haciendo era un linchamiento político, ya que la causa judicial contra él lo fue acusando de diferentes cosas. Todo eso está, de acuerdo con Amodio, orquestado por Huidobro y Mujica.
En su apertura, Fasano aclaró que no entraría en calificativos contra su “examigo” (en sus propias palabras), “porque no ayuda en el descubrimiento de la verdad histórica”. Dijo que este encuentro para debatir le causaba dolor, porque anteriormente admiraba a Amodio, hasta una noche en que este quiso que él traicionara a la izquierda. Explicó que por más amistad que tuviera con el extupamaro entonces preso, no iba a ir contra sus principios por esa amsitad.
Fasano aseguró que “bastaba leer” el manuscrito que Amodio le dio para saber que con eso se entregaba “de pies y manos” a diputados, senadores, a Seregni, a Wilson Ferreira y también se llevaba a la ilegalidad al Partido Comunista y otros organismos, incluso al propio Frente Amplio. “El desafuero de Erro era un poroto al lado de esto”, dijo Fasano respecto a un punto clave en la caída de la democracia en el país en 1973, cuando la Justicia Militar pidió que al senador Enrique Erro se le retiraran los fueros parlamentarios para juzgarlo por supuestas conexiones con el MLN.
“No entiendo, Héctor, cómo pensaste por un segundo que con mi trayectoria, toda una vida dedicada a la izquierda, iba a prestarme a redactar y ser el autor del libro. Iba a pasar a ser el traidor yo”, profundizó Fasano. Sostuvo que detrás del libro de Amodio estaba la intención de crear las condiciones subjetivas para un golpe de Estado que terminó siendo un “exterminio selectivo” contra la izquierda.
Allí comenzó un debate que perdió rápidamente las reglas de tiempo que se habían establecido de antemano, con los protagonistas por momentos enfrascados en discusiones demasiado circunscriptas a los ambientes en que ambos se movían. Amodio aclaró que su intención no era reivindicarse ni reivindicar al MLN -afirmó en más de una ocasión que se arrepiente de haber integrado la guerrilla- y que lo que buscaba era contar una historia distinta de la versión oficial, ya que según él figuras como Fasano la habían falsificado. “Vos le hiciste creer a todo el sector político que el que estaba conspirando con los militares era yo. Y todo el mundo sabía que era Fernández Huidobro”, lanzó el extupamaro. Fasano sostuvo que el hoy ministro de Defensa “hizo muy bien” en todo su accionar luego de caer preso y no ayudó al golpe de Estado, a lo que Amodio respondió que los guerrilleros planificaban un golpe propio con el coronel Ramón Trabal, que en 1974 fue asesinado en el exilio en Francia.
En sus denuncias, Amodio involucró incluso a Wilson Ferreira, quien “también estaba metido en la conjura”. “¿Era necesario hacer un libro?”, preguntó Fasano, “¿no bastaba con mostrar cómo era la organización del MLN?”. El exguerrillero contestó que el periodista le había pedido que le entregara el mismo manuscrito pero luego de eliminar los nombres de los políticos, y Fasano dijo que la negativa de él a hacerlo le hizo entender que el objetivo último del libro era el golpe de Estado. “¿Con quién iba a hacer yo el golpe de Estado?”, preguntó Amodio.
Respondió Fasano: “Lo hace un libro firmado por un director de diarios de izquierda que mete presos a once políticos todos antigolpistas”.
Amodio criticó también a Raúl Sendic (padre), de quien dijo que se falsificó la historia para “elevarlo a la categoría de héroe”, aunque para hacerlo en su opinión no era necesario mentir. De cualquier manera, calificó al líder tupamaro como “incontrolable” y acusó a Mujica y otros de entregarlo a los militares para parar la guerra, porque Sendic se negaba. Argumentó que tanto el expresidente Mujica como el ministro Fernández Huidobro llegaron a puestos de poder por una historia falsa.
Fasano, por su parte, aclaró que no temía el regreso de Amodio. “Quiero decirte, Héctor, que yo volvería a hacer lo que te hice. Si no yo era el traidor”, afirmó. Cuando Amodio dijo que él escribió el libro por voluntad propia y no por presión de los militares que lo tenían preso, Fasano se mostró sorprendido: “Tu libertad y la de tu compañera la podías obtener sin escribir el libro”. El otro respondió que lo escribió para juntar dinero para exiliarse y Fasano exclamó: “¡Ahh, peor, con un interés mercantil!”.
En una de sus acusaciones más controvertidas, Amodio sostuvo que no puede ir preso por el caso por el que está siendo indagado porque está condenado a muerte por el MLN y teme que lo maten en la cárcel. Sostuvo que eso es posible porque según él el MLN siguió realizando rapiñas y asesinatos con las armas que tenían incluso después del fin del movimiento e incluso con el retorno de la democracia, si bien reconoció no tener pruebas; Fasano lo consideró una acusación muy grave y respondió que fueron algunos elementos del MLN los que se sabe que llevaron a cabo delitos con las armas de la guerrilla, pero no que no lo hicieron bajo la forma de la organización. “Espero que algunos compañeros que vivieron esta historia salgan adelante” a hablar, dijo Amodio.
Otro momento tenso se dio cuando el periodista pidió al exguerrillero que diera nombres de los militares torturadores ya que había sido un testigo de primera línea. “Yo no voy a declarar contra los militares, yo vengo a dar mi verdad”, contestó Amodio y explicó que no lo considera necesario.
En el cierre, Amodio le pidió que opinara sobre su situación actual de indagado por la Justicia desde su perspectiva de abogado. Fasano le respondió que no había ido a eso al programa: “No solo te estoy tendiendo una mano, te estoy tendiendo la salvación de tu vida. Y vos lo considerás un chantaje”, le dijo. “Amodio es prisionero de su leyenda magnética de renegado de traidor. Él está en condiciones óptimas para volver a ser capitán de su propia alma, amo de su propio destino. Lo creo, no es un chantaje”. Que para eso debía denunciar a los militares en la causa en la que es indagado, a lo que él volvió a negarse.
.
Fiscal pidió procesar con prisión a Amodio Pérez
La fiscal Stella Llorente pidió este lunes el procesamiento con prisión del extupamaro Héctor Amodio Pérez, por un delito de «privación de libertad».
El pedido es de un «procesamiento con prisión por reiterados delitos de privación de libertad. Por la co autoría de reiterados delitos de privación de libertad. Las pruebas son basadas en testimonio», dijo Llorente en rueda de prensa.
La fiscal no se pronunció sobre las acusaciones de «tortura» que le realizaron a Amodio.
Vea aquí un video con las declaraciones de la fiscal:
EN DIRECTO en #Periscope: Caso Amodio Peres https://t.co/LESnWS0ejk
— El Observador (@ObservadorUY) agosto 31, 2015
Amodio Pérez, quien llegó a Montevideo a principios de agosto luego de 43 años para presentar un libro y quedó automáticamente implicado en una causa judicial por torturas iniciada en 2011 por un grupo de 28 expresas políticas.
Amodio Pérez, a quien la historia del MLN señala de haber traicionado a la organización al colaborar con los militares, declaró ante la jueza Julia Staricco y negó las acusaciones. Sin embargo, extupamaros y también militares ratificaron el rol que tuvo al facilitar detenciones que luego derivaron en torturas.
Llorente, que estudia el expediente desde el miércoles pasado, presentará a las 16.30 su dictamen ante la jueza Staricco. La representante del Ministerio Público tiene tres alternativas: pedir el procesamiento de Amodio Pérez, solicitar más pruebas o archivar la causa.
Publicado por el Blog El Muerto
Los docentes siguen en conflicto
Se ganó una nueva batalla en la lucha por los derechos laborales docentes en Uruguay al levantarse la declaración de esencialidad en la enseñanza. Queda mucho camino por recorrer y las negociaciones deben continuar, pero para las organizaciones magisteriales de Uruguay es digno de celebrar que el Consejo de Ministros de ese país haya escuchado las voces que miles de trabajadores y trabajadoras de la educación levantaron en favor del derecho a la movilización.
El 31 de agosto el Consejo de Ministros de Uruguay levantó la declaración de esencialidad, que vulnera los derechos laborales, declara ilegal las huelgas y que va en contra de la constitución de ese país y los convenios internacionales y que se había pretendido imponer desde el pasado 24 de agosto. Apenas siete días duró la provocación del gobierno hacia la clase trabajadora en su conjunto.
Tras una masiva movilización de los gremios de la enseñanza, el gobierno desistió de esa declaratoria y retiro la esencialidad para abrir el paso a una nueva mesa de negociaciones que deberá continuar, incluso mientras se discute el presupuesto nacional en el Parlamento.
El centro de las negociaciones es la inversión en la educación. El magisterio reunido en la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza del Uruguay (CSEU) exige cumplir con la promesa del 6% del PIB para la educación, lo que redunda en más y mejor inversión en el sistema educativo uruguayo.
La decisión del Consejo de Ministros de Uruguay de levantar la declaración de esencialidad en la Educación es un triunfo del compromiso y la lucha de los trabajadores de la educación organizados en la CSEU, del movimiento estudiantil y de los trabajadores nucleados en el PIT-CNT.
La Internacional de la Educación para América Latina había denunciado la declaración de esencialidad en la educación para prohibir la huelga, pues esa declaración vulneraba los derechos constitucionales a la movilización de cada trabajador y trabajadora uruguaya.
En ese momento la Internacional de la Educación para América Latina y en nombre de todas sus afiliadas, declaró el repudio rotundo a dicha declaración y reiteró su “apoyo permanente al magisterio uruguayo en la lucha por hacer cumplir la promesa de aumento del PIB para educación a un 6% y en la restauración de su derecho a la movilización en un pronunciamiento que se divulgó en medios masivos, redes sociales e inclusive se le hizo llegar a autoridades gubernamentales de Uruguay”. (descargar aquí la declaración)
Ahora el magisterio latinoamericano saluda y reitera su apoyo a la CSEU en las negociaciones por los ajustes salariales y en su justo reclamo al cumplimiento de la promesa del aumento al 6% del PIB para educación.
Desde Argentina la Confederación de Trabajadores de la Educación de la República Argentina (CTERA) saludó el triunfo de las y los docentes hermanos: “esta retractación del Gobierno uruguayo reafirma una vez más que la fuerza de los trabajadores organizados debe ganar las calles cuando es atado el derecho social a la educación. Felicitamos a los educadores, a las organizaciones docentes uruguayas, al movimiento estudiantil y al PIT-CNT por esta muestra de compromiso inclaudicable con la educación pública”.