EL CAPITAL. Capitulo XXIV. La llamada Acumulación Originaria. 1.El secreto de la acumulación originaria
Por Manu Maketo
1.El secreto de la acumulación originaria.
Se nos explica la acumulación originaria en economía política, como el pecado original en teología. Adán mordió la manzana, y con ello el pecado se posesionó del género humano. La acumulación originaria se nos explica como una anécdota del pasado. En tiempos muy remotos había, por un lado una élite dirigente, y por el otro una pandilla de vagos y holgazanes. Ocurrió así que los primeros acumularon riqueza y los últimos terminaron por no tener nada que vender excepto su pellejo. Y de este pecado original arranca la pobreza de la gran masa y la riqueza de unos pocos, que crece continuamente aunque sus poseedores hayan dejado de trabajar hace mucho tiempo.
En la historia real, el gran papel lo desempeñan la conquista, el abuso, el homicidio motivado por el robo: en una palabra, la VIOLENCIA.
El dinero, la mercancía, los medios de producción, en un primer momento no son capital. Hay que transformarlos. ¿Cómo?, es necesario que se enfrenten dos clases muy diferentes de poseedores de mercancías. A un lado, los propietarios de dinero, de medios de producción y subsistencia, y al otro lado, trabajadores “libres”, vendedores de su propia fuerza de trabajo. Con esta polarización del mercado de mercancías, están dadas las condiciones fundamentales de la producción capitalista. Este proceso transforma en capital los medios de producción y de subsistencia sociales. Y convierte a los productores directos en asalariados.
La llamada acumulación originaria no es más que el proceso histórico de escisión-ruptura entre el productor y medios de producción. Se le llama originario, porque es el origen, la prehistoria del capital.
El punto de partida del desarrollo fue el sometimiento del trabajador. La etapa siguiente consistió en un cambio de forma de ese sometimiento:
Del modo feudal, donde los señores feudales poseían las fuentes de riqueza, y entre ellas estaban sus siervos que eran tan propiedad del señor como los útiles de labranza; los maestros artesanos gremiales; los campesinos que trabajaban en las tierras comunales.
Al modo capitalista, para lo que fue necesario que separasen súbita y VIOLENTAMENTE, a grandes masas humanas de sus medios de subsistencia y de producción, y se las arrojase, en calidad de “proletarios totalmente libres”, al mercado de trabajo.
La expropiación que despoja de la tierra al trabajador, constituye el fundamento de todo el proceso.
Aunque la producción capitalista, esporádicamente, se estableció ya durante los siglos XIV y XV en los países del Mediterráneo, la era capitalista sólo data del siglo XVI.
La historia de esa expropiación adopta diversas tonalidades en distintos países, sólo en Inglaterra dicha expropiación adopta su forma clásica, y es por eso que tomamos de ejemplo a ese país.
-continuará-